Argentina tiene mucho en juego. Muchísimo. Por una parte el honor, por otro el botín, por otro la sed de revancha con Chile y por último, la continuidad de Lionel Scaloni. La Albiceleste tiene mucho más que perder que la Roja en el partido definitorio por el tercer puesto de la Copa América 2019 y quizás por eso en la trinchera transandina el duelo de mañana cobra, de alguna forma, mayor relevancia.

Así lo planifica el DT argentino, así lo piden los hinchas, así lo exige la dirigencia y así se palpita en el búnker albiceleste en Sao Paulo. "Esto no puede terminar así", es el mensaje interno, consigna Olé. Hay una mezcla de pena por la eliminación contra Brasil, y de rabia.

Según aseguran los medios argentinos, en el laboratorio de su selección saben que la única forma de maquillar un poco el golpe por la derrota ante el Scratch, es el duelo con Chile.

Apelan mucho, de hecho, al reciente historial frente a la Roja. "Y si encima el rival provoca un pequeño valor agregado por lo sucedido en las dos últimas Copas América, la motivación no faltará", replica Olé sobre el sentir del equipo. Derechamente, en Argentina hay sed de venganza por lo ocurrido en 2015 y 2016.

De hecho, en el equipo de Messi, incluida la propia Pulga, todos pidieron jugar. Nadie quiere restarse. Y salvo las dos bajas obligadas por suspensión de Marcos Acuña y Lautaro Martínez, el resto será el mismo equipo con el que mejor se ha visto Argentina en la Copa. Es decir, con Armani; Foyth, Pezzella, Otamendi, Tagliafico; De Paul, Paredes, Lo Celso o Di María; Messi, Agüero y Dybala.

Encima, Scaloni tambalea. Aún con haber alcanzado las semifinales en Brasil su puesto corre peligro. Porque si bien su imagen mejoró respecto de la fase de grupos, eso no le alcanza para convencer a los dirigentes argentinos para asegurar su continuidad después de diciembre, cuando termina su actual contrato. Un tercer puesto allanaría un poco ese camino. El DT lo sabe y confirmó su planteamiento: "No es lo mismo terminar tercero que cuarto, así que pondremos a lo mejor para este partido. No tenemos a Lautaro ni a Marcos Acuña. Cambiaremos por lo que creemos que es mejor", aseveró.

La prensa transandina también aporta lo suyo. "Las fotos de los últimos partidos en las Copas América 2015 y 2016 fueron con el equipo mirando al piso y, específicamente en la última, hasta con el 10 llorando (luego, sacudiría al país con su renuncia). Por eso ahora lo único que se puede cambiar es justamente esa imagen final: que la despedida sea de otra manera, por una vez, con los brazos en alto", escriben del otro lado de la cordillera.

"Es cierto que la lucha por el tercer puesto no puede considerarse una revancha de las finales perdidas. Ni por asomo. Pero la pica está. El condimento existe. Aquí y en Argentina también, porque de alguna forma este duelo generará más encendido que si el rival hubiese sido Perú. Por eso, aunque no sea el motor principal, acaso también sirva como combustible", agregan.

Incluso el mismo Olé se aventuró con una portada dedicada a la Roja este viernes: lleva una foto de Arturo Vidal (quien dijo que el partido no tenía valor), y escriben: "¡Sí que importa! Arturo Vidal dice que el tercer puesto no importa, pero en el bunker argentino todos quieren jugar y desquitarse del VAR y de los chilenos".

[embed]https://twitter.com/DiarioOle/status/1147071049537871872[/embed]