La evolución de Hugo Droguett ha sido notable. De ser un jugador destacado en la posición de lateral o volante, pero siempre pegado a la banda izquierda, pasó a ser el líder y conductor de la Universidad de Concepción, actuando como enlace. Ya había dado muestras de sus capacidades en Antofagasta hasta el semestre anterior, las que sigue ratificando ahora en la Octava Región. Madurez absoluta.

En Iquique, ante el conjunto local, el zurdo fue figura. Con su juego hábil e inteligente, no necesita de un esfuerzo físico excesivo para comandar las acciones. Con el pase preciso y la pausa justa, el ex Universidad de Chile logró que el encuentro se jugara a su ritmo.

Primero anotó un golazo (viciado, eso sí, porque la pelota salió en la jugada previa) para abrir el marcador cuando recién habían transcurrido 26 minutos de juego. Con una volea hermosa cerca del punto penal, hizo estéril cualquier esfuerzo del buen arquero Brayan Cortés.

Iquique pagó cara la desesperación que experimentó después de la jugada del apertura del marcador. Falló en el último tramo de la cancha y perdió los estribos, siendo el más perjudicado Mauricio Zenteno, quien se fue expulsado antes del descanso tras agredir a Walter Ponce.

En el complemento los sureños mantuvieron el dominio y ampliaron la ventaja sin mayor oposición. Con un inspirado Droguett, el juego asociado en la zona media y la velocidad en la transición de defensa a atauqe se tornó incontrarrestable.

El propio Droguett aumentó la diferencia (72′), antes que Jean Meneses anotara el tercero y sentenciara el encuentro. El broche de oro corrió, otra vez, por cuenta de la zurda de Droguett, que anotó el cuarto tanto del encuentro mediante un tiro libre de manual a poco del término del tiempo reglamentario. (83′).

El triunfo le da vida al Campanil, que ahora tiene diez puntos y escaló hasta la zona media de la tabla. Y hunde Iquique y a Jaime Vera, que tiene seis puntos, es antepenúltimo y tiene pocas, si no nulas, opciones de pelear por el título del torneo de Transición. De aquel equipo que hace poco peleó por el título y fue protagonista constante del fútbol chileno, no queda ni la sombra.

Por lo mismo, Jaime Vera parece haber agotado todo su crédito en la nortina ciudad. En los minutos finales del partido y después de finalizado el mismo, la parcialidad local pidió con cánticos e insultos su salida.

La tarde de Hugo fue perfecta y complicó a más de uno.