En distintos puntos de China, los crematorios afirmaron este martes que estaban esforzándose por lidiar con la afluencia de cuerpos, mientras el país lucha contra un alza de casos de Covid-19, que las autoridades han admitido que es imposible de rastrear.

Los hospitales y estantes de enfermería han quedado vacíos a raíz de la repentina decisión del gobierno, de levantar las restricciones, cuarentenas y pruebas masivas, después de casi tres años.

En la ciudad de Guangzhou, un crematorio aseguró que estaba incinerando 30 cuerpos al día, mientras que otro crematorio de la misma ciudad, comentó que “está tres o cuatro veces más ocupado que en años anteriores, estamos incinerando más de 40 cuerpos por día, cuando antes era sólo una docena”.