El Primer Ministro británico, Boris Johnson, continúa este lunes hospitalizado tras mostrar síntomas persistentes de coronavirus y aunque sus colaboradores insisten en que tiene “buen ánimo” y continúa al mando, deja un vacío en el Gobierno cuando la pandemia avanza rápidamente en el Reino Unido.

El líder conservador, de 55 años, anunció el 27 de marzo que había dado positivo al test de Covid-19 y permanecería siete días en aislamiento en su apartamento de Downing Street, a cuya puerta se le dejaban comidas y papeles.

Continuó encabezando reuniones por videoconferencia y muchos achacaban el lunes a esta falta de reposo el hecho de que el viernes siguiese teniendo fiebre y el domingo su médico decidiera ingresarlo para someterlo a unas pruebas como “medida de precaución”.

“Pasó una noche tranquila en el hospital St Thomas de Londres y tiene buen ánimo”, dijo el lunes un portavoz de Downing Street. “Permanece en el hospital bajo observación”, agregó, desmintiendo que se le hubiese aplicado un respirador pero no que se le esté administrando oxígeno.

Pese a todo, “continuará siendo informado de lo que pasa y estando al mando del gobierno”, insistió el ministro de Vivienda, Robert Jenrick, a la cadena BBC.

Por su parte, la autoridad usó su cuenta de Twitter para hablar sobre su estado de salud: Anoche, siguiendo el consejo de mi médico, fui al hospital para algunas pruebas de rutina, ya que todavía estoy experimentando síntomas de coronavirus. Estoy de buen humor y me mantengo en contacto con mi equipo, mientras trabajamos juntos para combatir este virus y mantener a todos a salvo”, escribió en Twitter Johnson.

El premier además destacó la labor de los miembros del NHS “por cuidar de mi y de todos durante estos tiempos difíciles”.

En Reino Unido, también se infectaron su ministro de Sanidad, Matt Hancock, y el heredero al trono, el príncipe Carlos de 71 años, pero ambos salieron del aislamiento tras haber superado la enfermedad.

Por su parte, “el primer ministro ha tenido síntomas persistentes desde hace diez días”, explicó Jenrick. “Esperamos que como resultado de esos exámenes sea capaz de volver a Downing Street lo antes posible”, agregó.