Al menos 13 personas murieron hoy en operaciones de las fuerzas del régimen sirio en la ciudad de Homs y en la localidad de Al Kusair, mientras otras cuatro perdieron la vida después de que efectivos de seguridad abrieran el fuego contra una marcha fúnebre.
Según fuentes opositoras desde Líbano, los efectivos, vestidos de civil, abrieron el fuego desde los tejados de casas contra los participantes en el funeral. Testigos hablaron asimismo de helicópteros sobrevolando esta mañana zonas residenciales y de ráfagas de metralleta.
Según activistas sirios asentados en Beirut, el Ejército realizó un fuerte despliegue de tropas en la frontera con Líbano para evitar la salida de refugiados. "Apoyadas por tanques, las tropas sirias han intensificado el martes su presencia en todas las fronteras con Líbano", dijeron fuentes.
"Las tropas están monitoreando también intensamente todos los pasos ilegales entre el norte de Líbano y Siria", agregaron. "Decenas de familias sirias han llegado al pueblo de Wadi Khaled en el norte de Líbano desde el amanecer".
Miles de sirios han huido al norte de Líbano desde abril a través de pasos clandestinos utilizados habitualmente por contrabandistas. Grupos de derechos humanos estiman que más de 1.400 civiles y 300 miembros de las fuerzas de seguridad han muerto desde el comienzo de las protestas contra el régimen de Bashar al Assad a mediados de marzo.