Benjamín Vicuña está cerrando días movidos. En unas horas partirá a Nueva York para estar presente en la entrega de los premios Emmy Internacionales, donde la segunda temporada de Prófugos se encuentra nominada a Mejor Serie Drama. A eso se suman las intensas grabaciones de Sitiados, la serie de época de Fox y TVN, que se rodó durante los últimos meses. Pero además el actor nacional ha tenido un intenso trabajo durante este 2014 en su regreso al cine, con tres películas, los que serán sus primeros estrenos en pantalla grande desde 2010. El chileno estará en La memoria del agua, de Matías Bize, sobre un matrimonio que debe afrontar la pérdida de un hijo (drama que el actor enfrentó en su propia vida), El bosque de Matías Lira, sobre los abusos del sacerdote Fernando Karadima, y un nuevo proyecto que lo tiene particularmente entusiasmado: se anunció el fin de semana pasado, que protagonizará su primera película en Argentina, una cinta de acción, dirigida por el trasandino Marcelo Páez. "Ha sido un año de mucho sacrificio", resume Vicuña.
¿Cómo se preparó para roles tan intensos? Uno de esos le toca personalmente, y el otro es un tema país muy fuerte estas semanas.
En el caso de la película de Matías Bize me pareció un guión muy conmovedor. Me sumé al principio con miedo, pero después con mucha decisión, para experimentar lo que seguramente sería una de las experiencias como actor más intensas que puedo haber vivido. Fue un riesgo, porque fue profundizar en una zona peligrosa, que procuro mantener protegida. Pero estoy orgulloso de haberlo hecho. Lo de Matías Lira, él ya lleva casi cuatro años con este proyecto. Hubo una investigación muy ardua para realizarla. Me reuní con James Hamilton para entender su realidad y analizamos muchos otros casos. Es una película que creo que va a generar muchísimo ruido. No sólo es una cinta sobre un problema religioso, sino un estudio de la condición humana.
En la ficción chilena, sobre todo en la audiovisual, la religión sigue siendo un tema algo tabú ¿Cómo trata El bosque esta realidad tan delicada?
Es verdad. En Chile, este tema ha sido tratado fundamentalmente a través de investigaciones periodísticas como Ciper o Informe especial. El mismo caso de Hamilton salió a la luz con una denuncia mediática. Y ahí destaco lo que hizo Matías Lira, porque he visto su lucha para sacar esta película adelante. Una lucha con fantasmas, algunos de carne y hueso, para poder hablar de las cosas que se necesita hablar. Siento que la película tiene esa misión de llevar a reflexionar, y es ahí donde uno como actor se siente útil, lo que te ayuda a levantarte en las mañanas. El cine no sólo sirve para evadir, sino para reflejar la sociedad.
Su personaje en esa cinta pasa por varios cambios físicos ¿Cómo se logró eso?
Ayudó el hecho que no sólo la historia abarcó un tiempo extenso en la vida del personaje, sino que la misma filmación se realizó en épocas distintas, dividiéndose en tres partes. Entonces, eso me daba tiempo para cambiar mi apariencia física. La película abarca 20 años de mi personaje, con Pedro Campos interpretándolo más joven.
Ahora grabará su primera película en Argentina ¿Cómo se siente?
Llevo ya seis o siete años de ida y vuelta en Argentina, y ya he hecho teatro y televisión, y la oportunidad de hacer mi primera película allá me tiene muy entusiasmado. Es algo a lo que quería llegar. Es indiscutible el prestigio del cine trasandino, y creo que llega en un excelente momento, cerrando un buen año cinematográfico. Es una historia de acción, lo cual me gusta para complementar las otras películas en las que participé. Veremos qué es lo que pasa, espero que se estrene en Chile.
¿Qué detalles puede dar de su personaje en esta película?
Mi personaje es un extranjero que llega desde España con su mujer a Buenos Aires, donde la raptan a ella, y me obligan a transportar droga como burro de vuelta a mi país con once horas de plazo, si no la matan. Entonces el personaje se ve en una encrucijada de arriesgarse a 20 años de cárcel si lo pillan, o que maten a quien ama. Llega al aeropuerto y decide no hacerlo, y parte a rescatarla él mismo. Y desde ahí en adelante la película es puro giro. De hecho sólo describí las primeras diez páginas del guión.
¿Cómo ve la realidad del cine chileno, donde las películas aclamadas y premiadas no atraen mucho público?
Creo que la diversidad es clave. Me parece fantástico que exista todo tipo de cine en Chile, desde el comercial hasta el de autor, con festivales internacionales y premios. Le hace bien a la industria que exista un Nicolás López así como un Andrés Wood. El ideal es que a todos les vaya bien y existan fondos para todos los géneros. Eso sí, creo que tenemos una responsabilidad de seguir conquistando al público frente a un sistema súper cruel, donde las películas extranjeras acaparan las salas. Falta darle protección a la industria chilena.