Fue por los monjes, tres monjes del sur de India que vinieron a Chile en 2001 y que reclutaron a un grupo de músicos chilenos para unos rituales que estaban a medias entre la oración y la escucha de música instrumental. Ahí estaba Rodrigo "Chino" Araos (35), multi instrumentista que antes había tocado con dos créditos de la música new age local, Entrama y Subhira, y que finalmente viajó a México para la próxima escala de esa gira espiritual. Llegando al D.F., se enteró que Rubén Albarrán (43), el cantante de Café Tacuba, también era amigo de los monjes y al rato terminaron tocando juntos y pensando en hacer algo a futuro. La última vez que los "tacubos" se presentaron en Santiago -en junio del año pasado en el Caupolicán-, el "Chino" se puso de acuerdo con Rubén y llevó a un amigo, el "Muñeco" (Juan Pablo Villanueva, 34), para que se conocieran y la cosa empezó a tener nombre y planes concretos.
Aprovechando un año sabático de Café Tacuba, Albarrán decidió montar esta nueva banda con sus dos amigos chilenos y Alejandro Flores, el histórico colaborador de los shows del conjunto mexicano. El debut fue en febrero pasado, cuando el "Chino" y el "Muñeco" viajaron para ponerse bajo las órdenes de Rubén. "Estuvimos desde el 15 de febrero hasta mediados de abril tocando en distintas ciudades, hasta el terremoto lo pasamos allá", comenta Villanueva sobre una coyuntura que los estremeció a la distancia y que terminó inspirando la composición del primer tema original que reporta el conjunto: Réplica del corazón.
Esa es una de las melodías inéditas de un grupo bautizado Hoppo! (que en lengua dakota o siux, originaria de Norteamérica, significa "vamos") y que en marzo grabó 10 temas en los estudios de Café Tacuba en México. ¿El repertorio? Nuevas versiones para temas clásicos del cancionero latinoamericano, como Gracias a la vida (Violeta Parra), Te recuerdo Amanda (Víctor Jara), Alfonsina y el Mar (de Ariel Ramírez y Félix Luna y popularizada por Mercedes Sosa) y Canto con todos (César Isella).
"Esta es una banda que esta llena más que nada de corazón y amor por la música, la naturaleza y su gente", explica Rojas sobre una inspiración que no es panfleto: "Tenemos una complicidad con los pueblos originarios y con los que sienten el llamado de respetar nuestra madre tierra. En eso coincidimos con Rubén y por eso decidimos regalar el disco a las organizaciones que estén involucradas con esto".
Una primera prueba de cómo suena Hoppo! en vivo vendrá el 9 de octubre, cuando se presenten en el Festival Maquinaria, que también reporta la contratación de números angloparlantes como Pixies, Incubus y Yo La Tengo. Un "barrio" de estilo que, a pesar del discurso y el repertorio, no está del todo ajeno a la música de Hoppo!: "Siento que hay una mezcla de folclor y rock que es muy potente y que nos da una dinámica muy rica", dicen los chilenos que ayudan a escribir esta nueva historia musical.