Desde que en el 2005 comenzó a entrar en vigencia la reforma al sistema procesal en todo Chile, los tribunales de justicia han dictado un total de 184 condenas de presidio perpetuo a nivel nacional.

Las cifras entregadas por el Ministerio Público, que incluyen condenas perpetuas simples (puede optar a beneficios a los 20 años) y calificadas (la opción de beneficios se abre recién después de 40 años), son encabezadas por la Región Metropolitana, con 53 resoluciones, mientras que la de Magallanes no presenta medidas de este tipo en los últimos nueve años.

Durante el 2010 la curva alcanzó su punto máximo con 32 fallos, donde uno de los casos más mediáticos fue el dictamen en contra de José Luis Sáez Gallardo, conocido como el "violador de La Reina", quien fue condenado a perpetua simple, por dos robos con violación, uno con intimidación frustrado y un caso de lesiones graves por la Fiscalía Oriente.

Los números han descendido. En el 2011 y 2012 el Ministerio Público consiguió 22 condenas, mientras en lo que va del 2013 se han registrado 16, marcando la cifra más baja de los últimos siete años.

Para el abogado defensor Juan Pablo Gómez, la tendencia puede deberse a diversos fenómenos. "Las perpetuas van relacionadas a delitos como los parricidios y femicidios. Desde mi experiencia, la baja puede venir desde las medidas cautelares que se adoptan en casos vinculados a violencia intrafamiliar con la determinación de abandono del hogar por parte del victimario. Eso puede tener una incidencia en que los conflictos no escalen a un mayor grado", expresó.

Por su parte, Claudio Uribe, presidente de la Asociación de Fiscales, señaló que se puede interpretar que debido a la gran cantidad de delincuentes que se encuentran cumpliendo condena, hay menos probabilidades de que ocurran delitos de esa gravedad. "Los más peligrosos están tras la rejas", dijo.

Lucia Damer, académica de la Universidad de Santiago y experta en temas de seguridad ciudadana, señaló que el análisis tiene que ir por la gravedad de los fenómenos delictivos. "Una ve hoy que la mayor cantidad de hechos ilícitos que ocurren en el país no son tan violentos. La gente privada de libertad lo está por este tipo de hechos y va en relación con los castigos que reciben. Creo que la delincuencia se ha extendido a nivel nacional, pero no los delitos que podrían llegar a convertirse en presidios perpetuos", argumentó

En ese sentido, Cristián Monckeberg, diputado de la UDI, comentó que una de las iniciativas que están trabajando en el Parlamento es aumentar las penas por homicidio. "En Chile, matar tiene muchas veces igual condena que robar. Siendo el derecho a la vida el bien jurídico protegido más importante, es lógico que tenga penas más altas", comentó.

Actualmente el imputado Celestino Córdova, acusado del crimen de matrimonio Luchsinger MacKay en la IX Región, arriesga una pena de presidio perpetuo.