Japón enviará cerca de 800 miembros de las Fuerzas de Auto Defensa (Ejército) a las islas del sur del país ante el previsto lanzamiento, a mediados de abril, de un satélite de Corea del Norte que está previsto sobrevuele esa zona, informó hoy la agencia Kyodo.
Conforme al plan de contingencia, unos 450 militares nipones serán trasladados a la isla de Ishigaki y otros 200 a la de Miyako, ambas en la provincia de Okinawa, según detallaron fuentes del Ministerio de Defensa a Kyodo.
En estas dos islas el Ejército nipón desplegará misiles tierra-aire PAC-3 con la intención de derribar el proyectil norcoreano si éste o sus fragmentos amenazan con caer sobre suelo nipón, tal como ordenó el pasado viernes el ministro de Defensa japonés, Naoki Tanaka.
La orden se dictó después de que Pyongyang anunciara su intención de poner en órbita entre el 12 y el 16 de abril un satélite de observación terrestre mediante un cohete de largo alcance, que previsiblemente sobrevolará la provincia de Okinawa.
Adicionalmente se enviarán unos 140 vehículos a un campamento que las tropas niponas instalarán junto al puerto de Ishigaki, donde carecen de instalaciones permanentes.
La isla principal de Okinawa, donde también serán desplegados misiles Patriot, recibirá unos 100 efectivos que serán destinados a la base aérea de Naha, capital de la provincia, y a la de submarinos de Nanjo.
Por último, a Yonaguni, la isla habitada más occidental de Japón, irán destinados unos 50 militares para responder a una posible caída de fragmentos del proyectil sobre el terreno.
Japón y buena parte de la comunidad internacional han condenado el plan del lanzamiento norcoreano, ya que consideran que se trata en realidad del ensayo encubierto de un misil balístico, lo que supone una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.