El entrenador del equipo nacional de baloncesto de Estados Unidos, Mike Krzyzewski, reconoció tras el entrenamiento realizado en Chicago, que la baja voluntaria que la pasada semana pidió el alero Kevin Durant, de los Oklahoma City Thunder, debido al cansancio "mental y físico" que sufría, fue algo que no se esperaba. Ahora, trabaja en adaptar los sistemas para llegar en la mejor forma posible al Mundial de España, que comienza a fin de mes.
"Sin duda que fue una gran sorpresa", declaró Krzyzewski, al concluir el entrenamiento que el equipo completó en Chicago, donde el sábado se enfrentará en partido amistoso a Brasil. "Además, su baja también frustró, de alguna manera, todo el proceso de preparación que habíamos iniciado en Las Vegas".
Krzyzewski admitió que Durant llegó como el gran líder del equipo, y que no se trataba de reemplazarlo en la plantilla, sino de todo lo que se había formado a su alrededor.
"Habíamos conseguido una gran preparación en Las Vegas, íbamos por delante en todo para estar listos cuando llegasen los partidos amistosos, como el del sábado ante un gran equipo como es Brasil", explicó Krzyzewski. "Los jugadores habían hecho una gran labor, teníamos grandes cosas en muchas áreas, pero la salida de Durant fue algo preocupante".
Sin embargo, Krzyzewski considera que con el trabajo realizado en Chicago y los partidos de preparación ante Brasil, República Dominicana y Puerto Rico, además de la estancia en Canarias, llegarían al Mundial en plenitud.
En parte, porque Krzyzewski considera que dentro del equipo ha quedado también un gran jugador y líder, como es el base Derrick Rose, de los Chicago Bulls, que cada día va a más en su rendimiento y puesta a punto.
"Su estatura como estrella cada día es mayor, tiene un nivel increíble, y su liderazgo ante el resto de los compañeros se lo ha ganado con el trabajo que hace en cada entrenamiento", subrayó el entrenador de Estados Unidos, que llega a España para defender el título de campeones. "Pero está claro que hemos tenido que cambiar de estrategia".
Especialmente en lo referente al apartado ofensivo, donde Durant era el pilar sobre el que descansaba la estrategia diseñada, y que ahora ha tenido que ser modificada.
"Teníamos ya construido un equipo completo que trabajaría en torno a Durant", admitió Krzyzewski. "Contábamos con el mejor encestador como número cuatro. Ahora ya no está, y eso ha cambiado de forma considerable nuestra estrategia".
La llegada del alero Rudy Gay, de los Sacramento Kings, puede estar en el punto de los cambios que Krzyzewski ha tenido que realizar de cara a cambiar la estrategia ofensiva del equipo, y el jugador es consciente que su llegada e incorporación al equipo no tiene como objetivo pasar un tiempo de vacaciones, todo lo contrario.
"Tengo la esperanza de ayudar y mucho al equipo, y en eso confío", comentó Gay. "He llegado para trabajar más duro que nadie y hacer las mismas cosas que el resto de mis compañeros".
En cuanto a la ligera lesión que sufrió el pívot DaMarcus Cousins, de los Kings, en la rodilla derecha al concluir el entrenamiento, Krzyzewski dijo que no estaba preocupado, aunque esperarían a las pruebas médicas que le hagan. "No creo que sea nada grave", comentó el entrenador. "Somos optimistas".
Por su parte, Jerry Colangelo, director de USA Basketball, también admitió que la baja de Durant cayó como un balde de agua fría dentro del equipo, pero de alguna manera se la esperaba.
"Conocía lo que pasaba por la cabeza de Durant, tanto lo relacionado con el posible contrato publicitario, como otras cuestiones, y cuanto me llamó para decir lo que pensaba hacer, de alguna manera me lo esperaba", señaló Colangelo. "Quería estar con el equipo, pero a la vez se dio cuenta que su actual situación contractual no le permitía seguir".
Los compañeros de Durant también se vieron sorprendidos por su decisión, algo que reconoció el base Stephen Curry, de los Golden State Warriors, el mismo que hace unos días dijo que era mejor atacante que el alero LeBron James.
"Todos lo veíamos en su mejor momento, pero como es lógico nadie puede meterse en decisiones personales y en el momento profesional por el que atraviesa, lo que significa que tiene nuestra compresión", señaló Curry. "Hemos recuperado todos la confianza y la misión es la misma tanto si estuviese Durant como sin él, por lo que llegaremos a España a dar lo mejor y será algo grande".
Mientras que Rose dijo sentirse feliz de trabajar en Chicago y el sábado poder enfrentarse a Brasil, en el United Center, el campo de su equipo, los Bulls, y ante sus seguidores.
"Estaremos listos para dar un gran espectáculo y demostrar que hemos trabajado muy duro", comentó Rose al concluir el partido informal del entrenamiento que estuvo abierto al público, y en el que jugó con el equipo titular de blanco, donde también estuvo Curry, Gay, James Harden y Anthony Davis.
Su rival fue el equipo de azul, que encabezó Kyrie Irving, Klay Thompson, DeMar DeRozan, Cousins y Kenneth Faried, y ganaron por 23-20.
Junto a los 10 jugadores titulares también tuvieron minutos de acción Andre Drummond, Mason Plumlee, Kyle Korver, Chandler Parsons y Damian Lillard.