El presidente Donald Trump denunció este jueves una "caza de brujas" contra su secretario de Justicia, Jeff Sessions, y otros colaboradores por sus supuestos contactos con altos funcionarios rusos durante la campaña electoral de 2016.
"Jeff Sessions es un hombre honesto", escribió Trump en un comunicado, acusando a los demócratas de haber "perdido el sentido de la realidad". Para el presidente, las presiones por la renuncia de Sessions son "una caza de brujas".
Sessions se encuentra en el centro de una tormenta política por haber mantenido reuniones con el embajador de Rusia en Washington en plena campaña electoral del año pasado, pero ocultó esos encuentros en la audiencia de confirmación a que fue sometido en el Senado.
Ante el escándalo, Sessions anunció este jueves que se mantendrá alejado de cualquier investigación realizada por agencias del Departamento de Justicia sobre las últimas campañas presidenciales, incluyendo las que se concentren en los contactos entre el equipo de Trump y funcionarios rusos.
En un breve comunicado, el mandatario sin embargo reconoció que su secretario podría haber "repondido de forma más precisa" cuando fue interrogado por los senadores sobre sus contactos con funcionarios rusos, pero apuntó que "claramente no fue intencional".
En la visión de Trump, la avalancha de acusaciones contra Sessions "es una forma para que los demócratas salven la piel por perder una elección que todos consideraban que ellos deberían haber ganado".
En la jornada, Trump había dicho durante un rápido encuentro con la prensa que mantenía "total" confianza en Sessions.
Al quedar claro que Sessions no había ofrecido al Senado informaciones completas sobre sus contactos con funcionarios rusos, se multiplicaron las declaraciones para que renuncie.
Los jefes de las bancadas del partido Demócrata en el Congreso -el senador Chuck Schumer y la legisladora Nancy Pelosi-, así como el presidente nacional del partido, Tom Perez, pidieron con todas las letras este jueves que Sessions presente su renuncia.
Otro senador demócrata, Sherrod Brown, pidió al Departamento del Tesoro la apertura de una investigación para determinar si los socios empresariales rusos del presidente Trump violaron las leyes estadounidenses, especialmente las sanciones de Washington a Moscú.