Luego de dirigir a todas las selecciones menores uruguayas, el también charrúa Fabián Coito (52 años) lleva poco más de medio año al mando de Honduras, a la que, según confiesa, tiene como meta llevar al Mundial de Qatar. Mañana, ante Chile, tiene un nuevo amistoso de preparación.

¿Cuál es su objetivo como DT?

El gran objetivo es llegar al próximo Mundial. Es el más ambicioso, pero tenemos un montón de cosas intermedias que tienen que ver con la organización y formación del fútbol de Honduras.

¿Cuál es su sello?

Podría decir que le doy mucha importancia a la persona; impactar en lo humano. Y es que se juega como se vive.

¿Es muy distinto el fútbol en Centroamérica?

Hay diferencias importantes. En Conmebol se ha entendido que hay que ir mejorando las condiciones para no quedarse atrás. En ese aspecto Honduras se ha quedado un poco. Hay muchas cosas a mejorar: formación, lugares, capacitación de técnicos. En Sudamérica está mucho más desarrollado.

Viene de ser medallista panamericano, ¿esa será su base?

Creo que sí, pero no puedo renunciar a los futbolistas que juegan en el exterior. El cambio en el futbolista debe ser cuando es más joven y en esa selección Sub 23, si bien ya están grandes, estamos a tiempo de intentarlo. Son el recambio.

¿Qué le preocupa de Chile?

Estoy muy claro que Chile y Honduras son dos equipos que están en diferentes niveles. Chile pelea en los mejores lugares de Sudamérica y nosotros estamos en una etapa de desarrollo, pero que falta consolidar.

¿Chile y Honduras viven un proceso similar de recambio?

Estoy de acuerdo. Con diferencias, pero estamos en etapas parecidas en la búsqueda de futbolistas jóvenes para el recambio de aquellos que estuvieron muchos años con éxitos deportivos recientes, como Chile y sus copas América y Honduras que fue a dos mundiales seguidos (2010 y 2014). Es fácil decir que hay que encontrar el recambio, pero si no hay resultados hay disconformidad y el recambio lleva tiempo.

¿Que Chile no esté con sus principales figuras lo hace más fácil?

Es diferente. El potencial de todo equipo lo hacen los jugadores. Que no estén futbolistas de esa talla, como Vidal o Alexis, lógicamente que en lo futbolístico cambia, pero aparecen quienes quieren aprovechar la oportunidad, que actitudinalmente lo encaran como un desafío mayor, quizás más que una figura. En los papeles, que no estén le quita potencial a Chile, pero no puede dar lugar a imaginar que el rival será más débil.

¿Con qué se encontrará Chile?

Seguimos siendo una selección en formación. Va a encontrar a un equipo que intenta cosas, que da continuidad en su zona defensiva. Con Puerto Rico hicimos una buena presentación y la intención es hacer un juego parecido: ser un equipo duro, que sepa lo que quiere. Y no recurrir al golpe.

El último Chile-Honduras fue muy favorable para la Roja.

Lo he visto, pero más que para preparar este partido. Yo llegué después de ese duelo. Sirve como antecedente, pero será distinto.

Rueda dejó huella en Honduras.

Dejó una gran impresión. Es indudable que hizo cosas buenas. Es muy querido y considerado. No sorprende ese cariño. Debe ser lindo para él. La gente acá está entusiasmada con su vuelta.

Recuerdos del sur

¿Qué recuerda de su paso por Provincial Osorno en 1993?

Recuerdo a mis compañeros y tengo amigos con quienes mantengo una linda relación. Es un grato recuerdo, porque fue una de mis primeras salidas de Uruguay. Chile es un gran país. Viví una experiencia tremenda. Aún sigo a Osorno, aunque ahora está lejos de las categorías más altas. Fue un gran año. Personalmente fue bueno y mantuvimos la categoría.

¿San Pedro Sula es una ciudad tan peligrosa como se dice?

Mi información es la misma que tenía por las noticias. Y sí, hay una forma de valorar la vida que en Sudamérica sorprendería, pero personalmente no puedo decir nada, porque la gente conmigo ha sido espectacular. Me siento cómodo, no tengo ninguna queja.