¿La sensación más parecida a ganar este bronce?

No es comparable a nada.

¿Qué nota le pone a la sede?

Un siete, la verdad.

Si no fuera patinadora, ¿qué estaría haciendo?

Estudiando derecho. Tengo mucho sentido de la justicia, me gusta defender los derechos de la gente.

¿Fue justa su medalla?

Sí, muy justa y merecida después de todo el esfuerzo.

¿Su mayor virtud?

Lo rápida que soy.

¿Su mayor defecto?

Me cuestan mucho los piques, las aceleraciones seguidas. Es un punto débil.

¿Un libro?

Antes de venir, leí uno de Mandela. Y me encantó. Fue muy inspirador.

¿Cómo titularía su medalla?

El premio a la constancia.