Las marchas y protestas que se han producido durante los últimos días en numerosas ciudades de Colombia continúan afectando la programación de la Copa Libertadores y de la Sudamericana.

Este mediodía, la Conmebol informó que otros dos nuevos partidos, que se debían jugar en tierras cefeteras, tendrán que ser trasladados a otras sedes por razones de seguridad, principalmente.

Se trata de los compromisos entre Junior de Barranquila vs. Fluminense, por la Libertadores (que debía jugarse mañana, a las 18 horas); y Tolima vs. Emelec, por la Sudamericana (estaba fijado para hoy, a las 20.30).

La Confederación aún no ha anunciado dónde se desarrollarán finalmente aquellos dos encuentros. En el caso del duelo entre Junior y Fluminense, los brasileños, incluso, ya habían viajado a Colombia para enfrentar a los tiburones.

Sin embargo, hasta la barra brava del equipo de Barranquilla emitió un comunicado donde pedía que el cotejo se aplazara, ya que la situación país no era la mejor. De lo contrario, se verían en la obligación de impedir la realización del compromiso.

Las protestas en Colombia ya habían obligado a la Conmebol a reprogramar otros partidos, como el de River Plate, que mañana debía visitar a Independiente de Santa Fe, en la ciudad de Armenia. Como no se pudo garantizar la seguridad, el duelo fue trasladado para Asunción, donde se jugará mañana, a las 20 horas.