SEÑOR DIRECTOR:
El 14 de abril se cumple un año desde el acuerdo político que resultó en el fast-track de 31 proyectos priorizados en materia de seguridad. Si bien se logró bastante de lo comprometido, no debemos olvidar la relevancia de lo que está pendiente: las reglas de uso de la fuerza (RUF), la creación del Ministerio de Seguridad Pública y el fortalecimiento y modernización del Sistema de Inteligencia del Estado, entre otros.
Estas últimas materias, que son, además, las de mayor complejidad técnica y política, requieren en esta etapa un estudio con sentido de urgencia, pero que en ningún caso impida su análisis con detención. Para contar con apoyo de las Fuerzas Armadas en tareas críticas se necesitan las RUF; para especializar las políticas públicas en materia de seguridad se necesita un ministerio especializado; para abordar las amenazas tradicionales y no tradicionales a la seguridad y a nuestra democracia necesitamos un sistema de inteligencia a la altura.
Tanto el Congreso como el Ejecutivo hicieron un gran esfuerzo durante todo 2023. Es de esperar que dicho trabajo continúe con el mismo ímpetu durante este año.
Fiorella Romanini
Abogada
Libertad y Desarrollo
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