Fue el primer Consejo de Presidentes virtual en la historia de la ANFP. La citación fue a las 11.00. Los 33 clubes que componen la Primera División y la Primera B tuvieron derecho a un solo delegado, que en los días previos debió responder preguntas para comprobar su identidad. Con el fin de evitar infiltrados, todos debían tener activadas sus cámaras. Así fue la reunión en la que Sebastián Moreno, presidente del fútbol chileno, oficializó su renuncia, la misma que ya había manifestado de palabra el 7 de mayo ante cuatro representantes de la oposición.

El formato trajo imprevistos y alguna molestia. Por ejemplo, a varios presentes no les gustó que el timonel estuviera recién probando el micrófono a la hora de inicio. O también que hubiese 55 conectados antes de que comenzara la cita, entre dirigentes, funcionarios de Quilín y otras personas. Hubo clubes que hasta tenían dos consejeros, como Universidad de Chile. Aquel impasse provocó que el director Mario Conca tuviera que retirarse y dejar solamente a José Luis Navarrete, mandamás de Azul Azul.

Superados los inconvenientes, y con varios minutos de retraso, partió la reunión. Tomó la palabra Moreno. Su discurso estuvo centrado en que fue víctima de algunos directivos. Según testigos, no hubo agradecimientos al trabajo de sus exdirectores, prueba de la distante relación que tenía con ellos, aseguran. “Renuncio para generar nuevos caminos de entendimiento, pensando en el futuro de la actividad y para que de una vez por todas existan señales y acciones concretas para que algunos dejen sus intereses particulares y piensen en la importancia del fútbol en nuestra sociedad”, expuso luego el abogado, en la página web de la ANFP. Su salida incluye la presidencia de la Federación de Fútbol.

EL DIRECTORIO DE TRANSICIÓN

Moreno sostuvo que la renuncia era un acto exclusivo suyo, por lo que el Consejo no tenía por qué aprobarla. Sin embargo, diversos presidentes se opusieron: querían que quedara en acta que su renuncia era aceptada de forma unánime por los clubes. Y así fue. “Eso no le gustó para nada”, revela uno de los directivos que participó en la reunión.

Ya superado ese punto, se ratificó que la futura elección será el próximo 30 de julio. Ese mismo día, el timonel dejará su cargo oficialmente, al igual que Marcos Kaplún y el directorio de transición. Justamente, fue la Gobernabilidad la que impuso sus cuatros candidatos ante los cinco de la Rebelión: Jorge Aguilar (28 votos), Arturo Guzmán (28), Raúl Jofré (26) y Jorge Yunge (25) fueron elegidos por mayoría absoluta. Eduardo Olivares (21), Marcelo Pesce (21), Jorge Siade (21), Carlos Ferry (19) y Eduardo Rey (19) no lograron el piso de 25 preferencias. La primera reunión de la nueva mesa será hoy.

La votación tuvo ciertas particularidades. Por ejemplo, Cobresal se abstuvo por los nueve candidatos, mientras que Universidad de Concepción votó por dos de la Gobernabilidad y por tres de la Rebelión. Temuco apoyó a todos los postulantes de la Gobernabilidad, menos a Yunge, pese a pertenecer al mismo bloque. “Tendrán sus motivos, pero los desconozco. Tengo la mejor impresión de Marcelo Salas y Deportes Temuco”, dijo Yunge.

Evidentemente, en la Rebelión no quedaron contentos, menos con aquellos clubes a los que consideraban aliados, como Coquimbo. Sus dardos apuntan al agente de jugadores Sergio Morales, uno de los máximos accionistas del cuadro pirata.

Ya al final, el hecho de que ningún candidato se realizara el examen de idoneidad de la Conmebol causó controversia. El problema se resolvió rápido, según los mismos consejeros, ya que se trata de una exigencia solo cuando hay una elección por listas, y no para completar un directorio.