Socavones: Gobierno instruye a Carabineros investigar fallas y responsables por robo a 46 departamentos evacuados

Socavones en el campo dunar de Viña del Mar.

Pese al perímetro de seguridad dispuesto por el Ministerio del Interior, los edificios Kandinsky y Miramar fueron vulnerados. Frente a estos hechos, la delegada presidencial regional solicitó al general de la V Zona de Carabineros el inicio de una investigación interna que permita establecer eventuales fallas en el servicio. Los afectados apuntan a las autoridades.


Este martes, la delegada presidencial de la Región de Valparaíso, Sofía González, se reunió con el general de la V Zona de Carabineros, Edgard Jofré, para abordar los hurtos registrados en al menos 46 departamentos de los edificios Kandinsky y Miramar Reñaca, evacuados por su proximidad a los dos socavones producidos en agosto y septiembre pasado en las dunas de Viña del Mar.

Inmediatamente después de ambos deslizamientos, la delegada presidencial ordenó el desalojo de esos dos edificios y del Santorini Norte, además instruyó establecer un perímetro de seguridad custodiado por Carabineros y el municipio para evitar el acceso de transeúntes y facilitar la reconstrucción que lleva a cabo el Ministerio de Obras Públicas. Asimismo, en octubre autorizó a los propietarios a retirar sus enseres presentando una declaración notarial que exime al Estado de responsabilidad en caso de producirse algún accidente.

El protocolo establece que las mudanzas se realizarán entre martes y sábado. Para ello, se permitió el uso de ascensores como montacargas con un generador eléctrico, ya que los edificios tienen suspendidos los servicios de agua y luz. Pero este fin de semana los elevadores del Miramar presentaron fallas y un grupo de técnicos fue el lunes a revisarlos. Fue entonces cuando percataron la apertura forzada de ventanales y puertas. La comunidad denunció el hecho y el Ministerio Público abrió una investigación. Y este martes, mientras la Brigada de Robos (BIRO) de la PDI levantaba evidencia, se advirtió que en el Kandinsky también hubo presuntos robos.

Ante los hechos, los residentes criticaron la seguridad dispuesta por el gobierno y la delegada Sofía González informó que “he sostenido una reunión con el general de la V Zona (Edgard Jofré), quien me ha entregado un informe respecto de la situación de los edificios Kandinsky y Miramar. He solicitado y así se ha acordado comenzar con una investigación interna que permita establecer eventuales fallas en el servicio y también responsabilidad. Y, además, inmediatamente reforzar la presencia policial y el control sobre el perímetro de seguridad que nos permita dar mayor certeza a los vecinos y vecinas del sector”.

El martes por la mañana, desde Carabineros informaron que están desplegados en el sector, pero a la altura de la Avenida Concón Reñaca, para evitar que la gente se acerque a los socavones. Por su parte, desde la Municipalidad de Viña del Mar señalaron que la patrulla municipal, cuyo rol es preventivo, también está presente y que no advirtió el robo.

Doble drama

Al drama de tener que desocupar los departamentos forzosamente producto del riesgo que implica habitarlos, a los residentes se les suma el problema de los robos.

En relación al hurto en el edificio Miramar, el vocero de la comunidad, Manuel Ludueña, cuenta que los técnicos “se dieron cuenta que había unos ventanales del edificio abiertos, que se rompieron puertas y así lograron entrar a los departamentos. Esto tiene que haber pasado entre el sábado y el domingo. No hay cámaras, porque no tenemos luz”.

Ludueña apunta a la responsabilidad de la autoridades. “La delegada presidencial lo primero que dijo es que habría seguridad, un perímetro, carabineros, incluso un vehículo municipal, pero parece que no pasó nada, o que no resultó”. En voz de los residentes, reclama que “estamos desamparados. Las autoridades tienen muchos buenos deseos, pero concretamente nada. Con esto, ¿qué nos queda esperar? Tenemos temor de que nos vuelvan a robar. O, Dios no quiera, se tomen estos departamentos. Esto es un doble drama para nosotros”.

Trinidad Carreño, una de las propietarias del edificio Miramar, que no fue afectada por el robo, añade que “esta situación se veía venir. Es indignante. El guardia municipal y el carabinero que está de punto fijo ni cuenta se dieron. A una vecina le rompieron todo el marco de la puerta y le robaron solo cosas chicas. Y hoy la gente que tenía agendada la mudanza no pudo ingresar. Es patético”.

Denuncia por robo en edificio Miramar

La comunidad del edificio Miramar Reñaca denunció el hecho a la Tenencia Reñaca de Carabineros, a eso de las 19:00 de este lunes, y el Ministerio Público instruyó peritajes a la BIRO de la PDI. La fiscal de turno de Viña del Mar, Romyna Ahumada, quien estuvo a cargo del procedimiento, informó que se trata de ingresos forzados y que “la primera dificultad (de la investigación) es determinar quiénes vivían en esos departamentos y si hubo especies sustraídas, o no, toda vez que como hubo un cambio de domicilio de manera imprevista, las personas sacaron muchas de sus propiedades, pero no sabes qué quedó en los departamentos”.

La persecutora agregó que durante el robo “el edificio estaba solo con un encargado de seguridad o coordinador de conserjes. No había mayor resguardo según las primeras informaciones que tenemos”. Asimismo, confirmó que no existen cámaras de seguridad en el inmueble -dado que está sin luz-, pero sí en las inmediaciones, por lo que “el trabajo de la BIRO es recuperar dichas cámaras y poder determinar las vías de acceso, quiénes fueron las personas que ingresaron, además de las pericias en cada uno de los departamentos para el levantamiento de evidencia”.

El subprefecto Carlos Zumarán, jefe (s) de la BIRO de Concón, unidad que este martes acudió al lugar, señaló que en el Miramar serían al menos 10 los departamentos afectados y que algunos “presentan solamente daños en accesos principales y otros con especies sustraídas, lo cual se está verificando con los propietarios”.

Zumarán añadió que hay accesos laterales de ese inmueble “que presentan signos de haber sido forzados, pero a su vez como el edificio no cuenta con suministro eléctrico las puertas se encuentran sin sus cerraduras, por lo que facilita aún más el acceso”.

A partir de este acontecimiento, la comunidad solicita a las autoridades dotar de servicios básicos al condominio para poder contratar a un nochero o conserje que cuide el edificio.

Según ha informado el gobierno, los trabajos de rehabilitación del colector de aguas lluvias -cuya rotura provocó el primer deslizamiento-, rellenar los socavones y rehabilitar la ruta de Avenida Borgoño tomarían entre 12 y 14 meses.

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