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En estas jornadas deliciosas lo único que me atrevo a proponer y disfrutar son los panoramas al aire libre. Si alguien me invita a una velada soñada con tentaciones al por mayor, mi imagen mental es al aire libre, terrazas y azoteas. Da lo mismo si es un balconcito de 2x2 o salir por la ciudad, el punto es que hay que disfrutar de las noches cálidas, los almuerzos full sol y hacer lo imposible para que nadie se quiera mover del lugar. Siempre, claro, con música ad hoc y algunas gracias.
Sabemos del daño que hemos provocado al medioambiente. Oímos hablar de las emisiones de CO2, de crecimiento sustentable y transacciones de bonos de carbono. Responsabilizamos a la 'humanidad' y esperamos soluciones desde el gobierno cuando de problemas ambientales se trata. Podemos seguir escuchando, hablando y esperando, o recordar que en nuestras propias manos hay muchísimo por hacer. Al final 1+1 siempre será dos. Por esto, tómese unos segundos para decidir dónde quiere que termine la basura que tiene en su casa: en un relleno sanitario o quizás, en la cadena del reciclaje. Usted decide.
Elegimos seis propuestas. Urbanas, al borde del mar o con características sustentables, cada una un verdadero placer a los sentidos, una oda al relax y un total elogio a la naturaleza que la rodea.
Madre e hija armaron un mundo alucinante, facilitado por la cercanía de edad, la complicidad y por enfrentar la vida de la misma manera, esa que fomenta el andar con la mejor de las ondas y con la alegría como ingrediente principal.
La arquitecta Irma Vicuña, dueña de una extraordinaria visión y exquisito gusto, supo remodelar y apropiar la arquitectura moderna de este departamento a su estilo de vida, logrando espacios continuos y de extrema luminosidad.
Una amante del sur de Chile hizo de él una forma de vida. Cinco años en Puerto Varas: cinco años despertando con la mejor vista al volcán Osorno y un trabajo diario por el medioambiente.
Ese era el principio que tenía en mente la pintora Claudia Byrt al proyectar su casa, y para eso se inspiró en la de unos colonos que vio en Frutillar. El resultado fue la casa de sus sueños, un lugar que la inspira, tal como dicen por ahí, "con toda la magia del sur".
De Alemania llegaron los primeros colonos. Los de hoy vienen de nuestra capital o de grandes ciudades tras la idea de no separarse de la naturaleza en uno de los destinos estrella del sur de Chile. En este recorrido por Puerto Varas nos encontramos con varios que lo comprueban.
El verano en sí es una fiesta, un baile de aire caliente que tiene a todos con tonos de piel preciosos y la sonrisa en la cara. se trata de jugar con el cuerpo, de andar alegre y de disfrutar a tope el alargue del atardecer. La fiesta de enero comienza y da rienda suelta a trasnochar, estar preparado para sorpresas y abiertos al desenfreno por altas temperaturas. Con o sin look de mar/piscina en el pelo, siendo invitados o anfitriones, incitando o aceptando, llegan las fiestas veraniegas y más nos vale tener hasta una palmera bajo la manga.
