Veinte artistas, el mismo número de niños de la Fundación Mírame y un pigmento del que Chile es el único productor industrial en el mundo, el lapislázuli, fueron los ingredientes para dar vida a esta muestra. Un ejemplo artístico de que la inclusión y la diversidad es una ganancia para todos.
Antonia Reyes / Fotos: P. Velásquez y A. González
27 ago 2009 10:39 AM