PRODUCCIÓN Paloma Salas y Daniel Pacheco / FOTOGRAFÍAS Maximiliano Jorquera / Maquillaje y pelo Alejandra Cancino / ASISTENTE DE FOTOGRAFÍA Daniela Molina / Modelo Jasmine, The Syndical
12 oct 2018 01:34 PM
La actriz dirige la versión local de Mi hijo sólo camina un poco más lento, montaje que lleva varios años poniendo la piel de gallina a los espectadores de distintos escenarios del mundo y que ella enfrenta como parte de su lucha personal por naturalizar la discapacidad. "Es el granito que me toca aportar", dice, emocionada, justo antes de estrenar.
Hace 15 años hablar de cáncer de mamas era sinónimo de muerte, pero hoy es una enfermedad que detectada a tiempo tiene altas probabilidades de tratarse exitosamente. Además han aparecido nuevas soluciones estéticas que ayudan a sobrellevar el tratamiento y sus consecuencias. Estos cinco profesionales, desde sus distintas áreas, ayudan, apoyan y contienen a las valientes mujeres que luchan contra esta enfermedad.
Este podría ser el consejo ampliado a sus congéneres, a partir del que le dio su madre a ella cuando era niña y que aún intenta seguir. Con perseverancia y trabajo, esta profesora y escritora logró "un reconocimiento a formas más minoritarias de hacer literatura. A un largo hacer, más allá de las modas y de los dictámenes del mercado". Acá, un atisbo a su genio.
Los coleccionistas de discos suelen tener un tornamesa vintage y miles de vinilos amontonados que no saben dónde ni cómo guardar. Este tipo de mueble es capaz de contener esos tesoros de las maneras más sorprendentes.
Cada día hay más amantes de los libros objeto o de esos que cautivan por sus imágenes. Crece en paralelo, además, el entusiasmo por crearlos y publicarlos. Aquí mostramos un taller para acercarse a estas artes.
Una cápsula para Falabella, el relanzamiento de su página web y una colección prêt-à-porter con materiales naturales y sustentables son las novedades con las que esta diseñadora nacional espera cerrar este 2018, que describe como "un año de crecimiento".
La Escuela Amaranta Gómez comenzó en abril de este año con seis niños trans que hasta entonces estaban desescolarizados. Hoy tiene 19 alumnos y espera recibir muchos más. Pero este no sólo es un espacio educativo para niños transgénero, sino que también para niñas y niños que han sido víctimas de bullying en sus otros colegios, menores derivados desde Tribunales de Familia o programas de apoyo y prevención de violencia intrafamiliar. Aquí los sin lugar han encontrado un espacio.