Afortunados. Tenemos mar de punta a cabo. Elegimos a cinco personas que lo aprovechan hasta decir basta. Cinco personas que laten por el ritmo de sus olas. Les preguntamos por sus playas y las respuestas son exquisitas, profundas, son esas que hablan de otra conexión a la naturaleza.
Su opinión saca risas a quien lo escuche en La Venganza del Pudú -junto a Iván Guerrero y Juan Carlos Fau- o en su nuevo microprograma llamado El Ciempiés, ambos de radio Horizonte. Es pensamiento hablado. "Soy un recién llegado que entró por la cocina y ya se instaló en el sillón del living". Así define su trabajo. Debutará en la versión 2.0 de El Pez Gordo, "un programa con moral de bar en el que conversaba con tipos poderosos, y otros no tanto, estuvo un mes al aire y lo transformamos en entrevistas para la tele en internet". Todo, además de tener una novela corta en revisión, escribir una biografía por encargo y estar terminando un guión para cine.
Una mirada crítica hacia el rol del diseño mundial, dejando de lado los objetos para enfocarse en las tradiciones, lo artesanal, el desarrollo a escala humana y la sustentabilidad, es lo que proponen.
En medio de la vorágine de la Bienal de Arquitectura, Mathias Klotz nos habló de arquitectura sustentable, calidad de vida, valorización de las preexistencias, y hasta de cómo Santiago puede transformarse en una capital verde para el siglo XXI.
Así se autoproclaman los integrantes de este movimiento viñatero nacido el 2007, quienes se unieron para exprimir su personalidad en torno a una de las pasiones máximas de su vida: el vino.
Desde que empezó la supuesta plaga de polillas que la palabra bicho ronda mi mente. Sí, la vida -y esa microexistencia- es preciosa y sorprendente. Me acuerdo de una amiga muy talentosa que tenía una vitrina de vidrio con pasto de plástico y varios bichitos de plástico, lindo. Integrarlos es lo bello, juguetón. Ahora el uso de sus representaciones está en varias cosas y me gusta. A buscar y mezclarlos, en objetos, accesorios, sin saltarse alguna mirada real que interprete ese mundito. ¡Ah! Y todos son una excelente opción para los regalos que estas fechas imponen.
Las aristas de este proyecto son tres: arte, urbanismo y patrimonio. Primero, porque se trata de un espacio que alberga talleres artísticos; segundo, por la idea de conservar el barrio en su escala; mientras que lo tercero se da al apostar por mantener vivo un antiguo inmueble capitalino. El proyecto La Panadería es el responsable.
Es chileno, está radicado en Austria y es pieza fundamental del renacimiento del diseño austríaco contemporáneo. Invitado a la Bienal de Diseño, Chile se Diseña, conversó con nosotros de su irrupción en Europa y sus múltiples proyectos.
Providencia es por su ubicación estratégica y privilegiada, sus construcciones (más o menos antiguas, pero en su mayoría de calidad), diversidad, parques, almacenes, kioscos y oficinas, un buen resumen de la ciudad que nos gusta. El barrio donde uno en algún momento vive y donde, al parecer, uno está destinado a volver. Si no, pregúntele a Paula Edwards.
A comienzos de esta primavera viajé al Parque Nacional Llanos de Challe para conocer el desierto florido en vivo y en directo. Ubicado a unos 40 kilómetros al norte de Huasco, este lugar alberga una variada flora y fauna con muchas especies únicas de esa zona. Las añañucas amarillas y rojas, el cactus copiapoa y la famosa garra de león, una planta con flores que sólo crece en un área restringida de la costa de la III Región, fueron algunas de las especies que pude ver.
El arquitecto Sergio Cereceda y la diseñadora de vestuario Florence Collin cambiaron un barrio bohemio de París por la tranquila calle Lautaro, en Providencia. Calidad de vida y nostalgia de ver a sus hijos jugar en la misma plaza donde lo hacía su padre motivaron su nuevo andar.
