En medio de la ola feminista que vive el país, un grupo de diputados presentó un proyecto de ley para que los padres puedan elegir de mutuo acuerdo qué apellido llevarán primero sus hijos. Una situación que ha tratado de ser legislada sin suerte desde 2001, dejándole a los chilenos como única alternativa la vía judicial a la hora de querer modificar sus nombres. Aquí dos jóvenes relatan el proceso que siguieron para dar protagonismo a sus madres en su identidad legal.
Alejandra Jara
4 jun 2018 06:01 PM













