Lo que era un secreto a voces se oficializó el sábado, antes de que el PSG jugara su último partido en la liga francesa, ante Clermont. “Tras dos temporadas en la capital, la aventura entre Leo Messi y el Paris Saint-Germain llegará a su fin a finales del ejercicio 2022-23. El club desea, con cierta emoción, muchos más éxitos a Leo para el resto de su carrera”, manifestó el club galo, despidiéndose del crack argentino. Esto ya lo había adelantado en la semana el técnico Christophe Galtier, pero faltaba que la institución lo confirmara.

“Me gustaría dar las gracias a Leo Messi por sus dos temporadas en París. Ver a un siete veces ganador del Balón de Oro en la Rouge & Bleu y en el Parque de los Príncipes, ganando dos títulos consecutivos de la Ligue 1 e inspirando a nuestros jugadores más jóvenes ha sido un placer”, manifestó el presidente del PSG, el qatarí Nasser Al-Khelaifi, en un comunicado oficial. “Su contribución al París Saint-Germain y a la Ligue 1 no puede ser subestimada”, agregó.

Si hay algo que sorprende en el quiebre de esta historia es la frialdad con la que la Pulga se marcha de la institución y el cambio en 180 grados que se dio en este nexo. El rosarino llegó a la Ciudad Luz como una megaestrella, revolucionando una competencia que era el “pariente pobre” dentro de las cinco grandes ligas de Europa. Juntar a Messi con Neymar y Mbappé no sólo era para frotarse las manos con semejante tridente, sino que también ocasionó que la Ligue 1 entrara con mayor fuerza en el radar de los seguidores del fútbol internacional. El factor Messi le agregó mayor mediatización al torneo galo. La inquietud es saber si este interés caerá sin el argentino (venta de derechos de TV, merchandising y más). En lo inmediato, el PSG ha perdido más de un millón de seguidores en Instagram durante el fin de semana.

Pocos apostaban a que el idilio que empezaba a nacer, iba a terminar de la manera en que terminó: Messi, abucheado por los ultras del PSG (los barrabrava) cuando desde los altavoces del Parque de los Príncipes se pronunció su nombre en la presentación del once inicial del juego ante Clermont, que despidió la temporada.

El balance del rosarino durante su mediática estadía en la capital francesa es tan dulce como amargo. Disputó un total de 75 partidos (6.508 minutos), con 32 goles y 34 asistencias. Sus 66 participaciones en goles contribuyeron a que levantara tres títulos: dos Ligas y una Supercopa de Francia. Sin embargo, falta algo no menor. No pudo conseguir a lo que fue al PSG: la Champions League. El objeto de deseo del club de capitales qataríes es ser campeón de Europa y no ha podido conseguir la Orejona.

“Hermano, no salió como pensábamos pero intentamos de todo. Fue un placer compartir dos años más con vos. Mucha suerte en tu nueva etapa y que seas feliz”, fue el mensaje de despedida que le dedicó Neymar a su amigo Messi. Seguramente, nadie pensó en que la estadía de uno de los mejores jugadores de la historia iba a ser como fue en el PSG.

¿Y el futuro?

El 30 de junio finalizará oficialmente el vínculo de Messi con los parisinos. El futbolista se transforma, por razones obvias, en uno de los nombres propios del próximo mercado de pases. Su futuro es y será tema hasta que tome una decisión. ¿Dónde jugará el campeón del mundo?

Messi, durante la premiación de la liga francesa. FOTO: REUTERS/Benoit Tessier

No son pocos los que quieren verlo de vuelta en el Barcelona, el club de su vida. El domingo, uno de los personajes clave en el intento de los azulgranas en lograr el regreso del hijo pródigo habló y no fue muy optimista. Se trata de Mateu Alemany, el director deportivo del club culé y uno de los responsables del diseño que trata de darle viabilidad a esta “Operación Retorno”. Antes del partido del fin de semana ante el Celta, le consultaron sobre Messi. “Cuando se resuelva, daremos las explicaciones que correspondan”, respondió. Luego, le preguntaron si es que esperan el OK de LaLiga por el fair play financiero. Alemany dijo: “Hay muchas cosas...”.

La situación financiera del Barcelona no es holgada como para pagar así como así una carta costosa como la de Messi. No tiene el visto bueno el plan financiero que exige LaLiga. Por lo mismo, las otras opciones que aparecen en la órbita del rosarino son de potencias financieras, más no deportivas. Una es el Inter Miami, uno de los clubes más nuevos de la MLS. Tanto en Argentina como en Europa han dado a conocer que la institución, cuyo propietario es David Beckham, le presentó una oferta a Messi. Hace poco, el exjugador inglés Phil Neville dejó de ser el DT del club donde milita Robbie Robinson (alguna vez nominado a la selección chilena).

Por otro lado asoma el interés del fútbol de Arabia Saudita en contar con el astro argentino. En concreto, se trata del Al Hilal, último subcampeón del Mundial de Clubes, que hasta hace poco era dirigido por Ramón Díaz. La competencia saudí está empecinada en alcanzar fichajes de renombre para levantar a su liga. Primero lo hizo con Cristiano Ronaldo en el Al Nassr. Ahora está muy cerca la opción de que Al Ittihad se quede con Karim Benzema, quien se va del Real Madrid luego de 14 años. Los medios del reino han dado casi por hecho el arribo de la Pulga a Al Hilal, sin embargo todavía no hay claridades respecto a la determinación final.

Eso sí, es inminente la definición del futbolista, quien este mes tendrá actividad con su selección durante la fecha FIFA, con amistosos ante Australia e Indonesia, respectivamente.

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