Después de todos los problemas que tuvo Universidad Católica para jugar la Copa Chile en Rancagua, ahora nuevamente la falta de recintos perjudica a otro partido del mismo torneo.

La primera semifinal entre Universidad de Chile y Unión Española ya estaba fijada para el próximo domingo, en el estadio Elías Figueroa de Valparaíso, a las 15:00 horas, duelo en el que los azules serán titulares.

Sin embargo, un nuevo inconveniente afecta al elenco universitario azul, que ha tenido que trasladar varias veces su localía en esta temporada, tanto en el campeonato nacional como en la Copa Chile.

Según se enteró El Deportivo, el recinto de Playa Ancha no pasó el informe de Carabineros de Chile, realizado en la previa del encuentro que comienza a decidir uno de los dos finalistas del torneo.

En ese escenario, la negativa de la autoridad policial obligó que la Delegación Presidencial de Valparaíso tome la drástica decisión de no autorizar realización del importante partido.

Una vez que se fijó el partido en la capital costera, la autoridad regional puso objeciones a la posibilidad de que tanto azules como hispanos concentraran en la ciudad, situación por la que ambos planteles deberían desplazarse el mismo día desde Santiago.

Una de las principales razones para tomar tan drástica decisión fue la falta de contingente policial, de acuerdo con el informe de Carabineros.

Una situación complicada, ya que el cuadro universitario otra vez no tiene una opción viable de estadio para el importante enfrentamiento. Un hecho que debería obligar a la recalendarización del choque.

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