Con frialdad recibieron los senadores de oposición que conforman la Comisión de Trabajo del Senado, el proyecto de adaptabilidad laboral presentado por el ministro del Trabajo Nicolás Monckeberg y el subsecretario de la cartera, Fernando Arab.

La primera en mostrar su descontento con la iniciativa fue la presidenta de la Comisión de Trabajo, Adriana Muñoz, quien reprochó al titular de la cartera la conformación de dicha instancia.

"La Comisión de Trabajo del Senado va a tener que esperar que esta mesa de iluminados dé sus conclusiones para poder entonces empezar a legislar", afirmó la parlamentaria.

En la misma tónica se mostró el senador Juan Pablo Letelier, quien  aseguró que "fue un error gravísimo no haber activado al Consejo Superior Laboral antes de presentar este tipo de proyectos, porque ese es el espíritu del tripartismo", dijo.

"Por eso nos cuesta avanzar en estos temas porque a veces se dejan muerta las letras de las leyes", agregó.

Una mirada intermedia entregó la senadora DC, Carolina Goic, quien dijo que "lo importante" es poder escuchar a diferentes actores para sacar adelante la mejor legislación posible: "debemos cuidar este espacio".

La respuesta del gobierno

En tanto desde el Ejecutivo, el ministro del Trabajo, Nicolas Monckeberg, fue enfático en defender la instalación de la mesa técnica transversal, pero aseguró que por ningún motivo esa instancia va a remplazar el trabajo legislativo.

Por su parte, el subsecretario de Trabajo, Fernando Arab, insistió en resaltar las demás aristas que engloban al proyecto de adaptabilidad laboral, precisando que es una iniciativa que contempla temas como: la reinserción laboral; inclusión, nivelación de estudios y adecuación sobre nuevas plataformas.

El ministro y los parlamentarios hicieron estas declaraciones en el marco de la discusión del proyecto de adaptabilidad laboral que empuja el gobierno.