SAAM, compañía que presta servicios portuarios, de remolcadores y logística en Chile y América, cerró 2020 con resultados estables, pese a los efectos del Covid-19 en el comercio exterior.

El año pasado, SAAM cerró con utilidades por US$66,7 millones, una mejora de 15% respecto de los US$57,7 millones logrados en 2019, pero hay considerar un efecto extraordinario de US$11,5 millones por la adquisición de Aerosan durante el año pasado.

Las ventas y el Ebitda consolidados en igual periodo, en tanto, alcanzaron los US$ 584 millones (+10%) y US$ 213 millones (+21%), respectivamente.

En el cuarto trimestre, las utilidades sumaron US$27 millones más que duplicándose respecto de los US$13,3 millones logrados en el mismo periodo de 2019, mientras que las ventas y Ebitda consolidados fueron de US$157 millones y de US$55 millones, respectivamente.

El gerente general de SAAM, Macario Valdés afirmó que “desde el cuarto trimestre del año pasado vemos una mayor actividad en nuestras divisiones de negocio, asociada al proceso de reabastecimiento e incipiente recuperación de las economías donde operamos. En 2020 fue clave el resguardo de la salud de nuestros equipos para mantener la continuidad de nuestras operaciones y apoyar así la competitividad del comercio exterior. La pandemia implicó una caída relevante en la actividad –particularmente en nuestros terminales en Chile–, pero se lograron resultados estables gracias a la diversificación de nuestros activos y a variadas iniciativas de eficiencia operacional”.

El ejecutivo agregó que la crisis sanitaria encontró a la compañía en una posición sólida, que la ayudó a sortear mejor sus efectos, sin tener que detener su crecimiento inórganico. En 2020 SAAM acordó la compra del 70% de Intertug -empresa de servicios de remolcadores con presencia en Colombia, México y Centroamérica- y Aerosan, donde pasó a controlar el 100% de la compañía de servicios aeroportuarios.