Tras la fuga de salmones ocurrida en diciembre pasado, Ventisqueros aclara que se trató de dos hechos totalmente distinto. En Tubildad dicen que hubo un evento de mareas y corrientes que no se pudo prever, mientras que en Chincui no ocurrió nada que permitiera inferir la existencia de roturas de jaulas. Pese a la diferencia de ambos eventos, la empresa afirma en una declaración pública que se adoptaron todos los protocolos establecidos, y que entregaron los antecedentes a Sernapesca.

Especifican que tras una inspección pudieron constatar que en Tubilidad hubo fuga de salmones. "Como consecuencia de esta revisión, se llegó a la conclusión que efectivamente hubo una fuga de peces, la que alcanzó a un total de 26.830; esto es, 2,7% de la siembra total de dicho centro (0,09% sobre el total anual de siembra de la compañía). Se trata, como afirmó Sernapesca, de un escape menor que involucró a peces en proceso de cosecha y libres de antibióticos", sostienen en la declaración.

Descartan eso sí que haya habido fuga en Chincui. "En el caso del centro de acopio de Chincui, en cambio, no se observaron daños en redes o estructuras y con la estadística de las unidades procesadas en la planta de procesos, tampoco se detectaron diferencias entre el stock de peces previo al momento del aviso y el número final de unidades procesadas. Así, descartamos que se haya producido escape de peces en dicho centro", indican.

Tras lamentar los incidentes ocurridos, aseguran haber entregado todos los antecedentes a Sernapesca e indican que tienen toda la voluntad para trabajar con las autoridades.