Hace unos meses, el grupo Daimler dio a conocer una de sus jugadas más arriesgadas. El consorcio alemán anunciaba la creación de un modelo de súper lujo, el Mercedes-Maybach, el cual tomaba el nombre de la extinta marca que no tuvo los resultados esperados con los modelos 57 y 62.

De la mano de la estrella solitaria, se transformó en una opción a las versiones tope de línea del Clase S, o sea, algo aún más exclusivo que un "S" convencional.

Pero lo que quizás no estaba en mente era el resultado que obtendría, especialmente en países como China, al punto que desde su lanzamiento en febrero venden un promedio de 500 unidades mensuales. Sin duda, una cifra altísima considerando que tiene un precio &"desde&"  207.000  euros, unos $145 millones.

Con estas cifras, supera por lejos los números que tenía Maybch, que en el mejor año colocó 600 unidades en China. Este año, Mercedes espera alcanzar las 5.000 unidades, corroborando que su jugada apuesta está rentabilizando como pocos modelos lo hacen y superando en el Dragón Asiático a marcas como Rolls Royce o Bentley debido al estilo más moderno y que tienen en comparación con los vehículos de las clásicas marcas británicas.