En su primera reunión de 2019 la Reserva Federal dio todas las señales de un Banco Central más moderado para lo que resta del año, en relación a los activos 2017 y 2018, cuando aplicó cuatro incrementos de tasas anuales.

En esta ocasión, además de decidir mantener la tasa de interés en el rango de 2,25% y 2,5%, el organismo con sede en Washington señaló que será paciente con el proceso de retiro de estímulos de la economía de Estados Unidos.

"A la luz de los desarrollos económicos y financieros globales, junto con las presiones inflacionarias, el Comité tendrá paciencia ya que determina qué ajustes futuros en el rango meta para la tasa de fondos federales pueden ser apropiados para respaldar estos resultados", detalla la declaración de la Reserva Federal.

Media hora después de que se comunicara la decisión, a las 16 horas de Chile, Jerome Powell reafirmó la postura dovish de la institución que preside. "El caso para un incremento de la tasa se ha debilitado de algún modo", le señaló a los periodistas, ahora que ofrecerá conferencias de prensa tras cada reunión del Central.

La determinación dejó contento a Wall Street, que celebró con incrementos superiores a 1,5% en sus tres principales indicadores, favoreciendo las ganancias registradas en enero (revisar página 6). El panorama actual de los mercados neoyorquinos difiere bastante de lo observado durante diciembre, mes en el que la Fed aplicó su último ajuste de política monetaria y el S&P 500 registró un retroceso de 9,18%.

De hecho, para los expertos resultaron poco convincentes las razones esgrimidas por los gobernadores de la Fed para presentar esta postura más moderada. Chirs Rumpkey, economista jefe de MUGF, la decisión da la impresión de que "esta es la Reserva Federal más sensible al mercado en muchos años, ya que quienes formulan la política cambiaron el rumbo de esta reunión en gran parte debido a lo que los inversionistas del mercado de valores les estaban diciendo". En ese marco asegura que "la Fed ya no ve más alzas de tasas este año".

Asimismo, el economista Brian Chappata destacó en una columna en Bloomberg que en el comunicado del Central estadounidense se mencionó en dos oportunidades la frase "desarrollos financieros".

Desde su punto de vista, la Fed mostró "compasión" por Wall Street y "Powell parece haber decidido que el berrinche de diciembre del mercado de valores era demasiado ruidoso como para ignorarlo, según cómo cambió su tono. Él y otros funcionarios cimentaron esa opinión en la última declaración".

En este marco, las probabilidades de alza de tasas para la próxima reunión de marzo se han ido derrumbando desde el 60% registrado en marzo hasta el 1% actual.