El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, le bajó el perfil a la oposición o reticencia que hay entre algunos miembros de la DC, como el diputado Pablo Lorenzini, para respaldar el proyecto de reforma tributaria del gobierno, concretamente el ítem de la integración, que para los expertos es el corazón de la iniciativa.

En conversación con radio Duna, la autoridad se mostró confiado en que la falange cumplirá su palabra ya que "hay un documento firmado".

"Tenemos un acuerdo institucional firmados por tres partes: el gobierno, las pymes (…) y está firmado con la DC. Más que acuerdos personales yo tengo acuerdos institucionales", dijo el secretario de Estado

"No hay negociaciones particulares " con Lorenzini, enfatizó el jefe de Teatinos 120.

Respecto al debate en el Senado, en donde a priori asoma como más difícil el apoyo a la reintegración, el ministro descartó que el debate parte desde foja cero.

"No, no va a ocurrir eso. Yo estoy confiando de que vamos a poder construir acuerdos", sostuvo la autoridad, quien además afirmó que había "un mito urbano" en torno a la reintegración del sistema y que es positiva porque, a su juicio, le da mayor equidad al sistema y elimina la discriminación entre chilenos y extranjeros para invertir.

La primera semana de agosto

Cabe recordar que ayer en el Parlamento se acordó que el ítem de la integración se votará la semana del 5 de agosto próximo.

En ese contexto, Larraín defendió cada una de las disposiciones, ante las múltiples dudas sobre la recaudación que plantearon los legisladores de oposición.

La autoridad señaló incluso que se estaban utilizando supuestos conservadores de recaudación, ya que en medidas como el de retiros desproporcionados se proyecta sólo US$135 millones, aunque el potencial es de US$1.100 millones o el de market maker, previsto en US$44,9 millones, pero con potencial de entre US$60 y US$90 millones.