No es una exageración decir que cerca de 80 millones de personas seguirán el destino de un partido de fútbol. Flamengo de los suplentes Arturo Vidal y Erick Pulgar, contra Corinthians. Lejos, los dos equipos más populares de Brasil jugarán la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores. Sin embargo, por esas curiosidades del destino, el enfrentamiento entre las dos potencias no es considerado un clásico en Brasil.
Un número que no es antojadizo. Según el último estudio publicado por O Globo, un 21,8% de los habitantes del país más grande de Sudamérica son torcedores del Fla. Seguido por el 15,5% quienes son simpatizantes del Timao de Sao Paulo, en una nación que la componen 215 millones de personas, según las cifras del gobierno local.
Casi cuatro veces y media la población de Chile pendiente de un encuentro. Pero que, para los brasileños, es casi una cotidianeidad sin una estadística histórica que merezca ser escrutada.
“La gran diferencia de nuestro fútbol es que nuestros orígenes son estaduales, mas no nacionales. Brasil es un país grande que demoró mucho en unificar su campeonato”, dice Celso Unzelte, escritor brasileño y autor de más de diez libros sobre el cuadro corinthiano.
Y es que en la tierra de los pentacampeones, el fútbol se vive de una manera diferente. Un territorio tan grande necesitó muchos años para unificar su competencia. Mientras eso ocurría, los dos cuadros más grandes de Rio de Janeiro y Sao Paulo sumaban adeptos.
“Es cierto que se miden las dos mayores hinchadas del país. Flamengo es el más conocido a nivel nacional, porque hasta los años 50, Rio era la capital. Incluso, hay un distanciamiento geográfico de más de 400 kilómetros. Si te fijas, rivalidades como la de Corinthians contra Palmeiras o Flamengo versus Fluminense y Vasco da Gama, son partidos mucho más arraigados en el fanatismo de los torcedores”, dice el comentarista de ESPN.
Unificación tardía
El fútbol es el deporte nacional en el país grande de Sudamérica. Sin embargo, su gran extensión territorial obligó a que se igualaran los títulos mucho tiempo después de disputarse.
“En Brasil no se considera clásico, pero el duelo entre el Fla y el Timao tiene su historia. El antecedente más lejano es en 1918, es decir, es un encuentro centenario, pero su popularidad es más reciente. Si embargo, la connotación de derbi en Brasil tiene una proximidad geográfica o, bien, una historia en la Copa Libertadores”, explica Unzelte.
En la misma línea, el estadígrafo paulista, autor de una veintena de libros, agrega que “técnicamente, tenemos encuentros más frecuentes en la Copa, como Atlético Mineiro contra Flamengo, encuentros importantes cpmo Gremio y Palmeiras o este último club frente a Cruzeiro. Corinthians y el Fla solo se midieron en 1991 y en 2010″.
Lo cierto es que el Brasileirao, tal como se conoce hoy, solo comenzó en 1971. Antes de esa fecha eran otros los campeonatos que animaban la realidad de un país tan extenso.
“En los años 50 existían solo algunos torneos estaduales y la Copa Río Sao Paulo. Después en 1959, se inventó la Taça Brasil que incluyó a equipos de Bahía, Pernambuco, Paraná, Sao Paulo y Rio. En 1967 pasó a ser la Copa Roberto Gomes Pedrosa. Brasil perdió mucho tiempo con competiciones internas y volvió las espaldas para todo lo que ocurría en el continente como una posición de soberbia. Después, todos esos títulos se homologaron y pasaron al palmarés de los equipos como coronas nacionales”, dice Unzelte.
Asimismo, el historiador del Timao reconoce que la efervescencia por un partido entre Flamengo y Corinthians solo ha adquirido valor deportivo en los últimos años.
“La internacionalización de eso equipos es relativamente reciente. Recuerde que Flamengo hace muy poco logró su segunda Copa Libertadores, la primera fue en 1981. Los paulistas sólo lograron la primera en 2012. En ese escenario, los enfrentamientos internacionales representan una gran notoriedad, pero eso no ha ocurrido tanto a través de la historia”, confirma el escritor paulista.
En lo netamente futbolístico en la jornada de hoy, Arturo Vidal está en la convocatoria para el encuentro que se jugará en Arena Sao Paulo, a las 20:30 de Chile, según Placar y Gazeta Esportiva. Mientras que Pulgar no está entre los citados para el trascendental compromiso.