La "Marea Roja", concepto que se acuñó para reflejar la masiva presencia de hinchas en los estadios del Mundial de Francia '98, comienza a tomar cuerpo de cara a Sudáfrica 2010.

Según el último informe de la FIFA, Chile se alza como el tercer país sudamericano con más entradas adquiridas para la Copa del Mundo. Desde nuestro país ya se ha comprado un total de 9.676 boletos, a través de internet y paquetes de agencias, casi la mitad de los que concentran Brasil o Argentina, por lejos los líderes en la materia a nivel regional.

Según datos extraoficiales, el número de ticket transados hasta ahora le estaría asegurando al cuadro de Marcelo Bielsa un apoyo de aproximadamente unos tres mil fanáticos nacionales en los primeros tres partidos, ya que la mayoría de las entradas corresponde a los duelos de la primera fase.

Una cifra que, por importante que sea, no se compara al número de compatriotas que salieron desde Pudahuel, en 1998, para ser testigos presenciales de la actuación de la "Roja" en el Mundial galo.

Hace 12 años, fueron más de 12 mil los fanáticos que viajaron acompañando a aquella selección de Iván Zamorano y Marcelo Salas que llegó a octavos.

Más caro y menos ofertas

¿Cuál es la diferencia? "Los costos de traslado. Hoy llegar a Sudáfrica es 2,5 veces más caro que ir a Francia. Por esa razón la demanda es menor", explica Raimundo Achondo, principal operador aéreo en Chile para la Copa.

A través de su agencia, Achondo ya tiene vendido tres aviones, es decir, un total de 700 pasajeros. Sus programas contemplan dos opciones de estadías: cinco o 10 noches, con un costo de siete y 12 mil dólares, respectivamente.

Pablo Hoffman, gerente de la ANFP en 1998, cree que otra gran diferencia con el Mundial de Francia fue la masiva presencia de chilenos que existe en Europa.

"Muchos se trasladaron dentro de Europa a Francia y ofrecieron alojamientos a amigos y familiares. Eso permitió que se sumara mucha más gente. En cada partido tuvimos, como mínimo, 12 mil hinchas en las tribunas", apunta el ahora gerente de O'Higgins.

Otro tema son las ofertas de vuelo. Actualmente -y hace 12 años también- para viajar a París existen seis vuelos diarios, en cambio a Sudáfrica sólo uno y que exige, además, el paso obligado por Brasil o Argentina, ya que no hay vía directa desde Santiago a Johannesburgo o Ciudad del Cabo.