Nominaciones políticas
Señor director:
La declaración hecha por el ministro Francisco Vidal en el juicio del caso Chiledeportes, en orden a que se nombró a Juan Michel como director de la oficina metropolitana de dicha entidad para evitar problemas con el entonces presidente de la DC, Adolfo Zaldívar, no hace más que confirmar el imperio del "cuoteo" y la irrelevancia de los méritos para acceder a cargos en el sector público.
Pero no sólo eso. Cuando se nombra a una persona que no tiene el conocimiento y preparación para un cargo, sólo por las presiones de dirigentes de la coalición que gobierna, también se expresa un rotundo desprecio por la actividad involucrada.
En definitiva, lo que ha hecho la Concertación implica una falta de interés por desarrollar con éxito las políticas públicas. Nombrar a una persona cuyo interés no era sino representar intereses políticos reviste un menosprecio por el país y por las necesidades de la población y, en este caso, por quienes se dedican con compromiso, honestidad y pasión a una noble actividad como el deporte.
Claudio Abarca Lobos
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