Cada verano, el número de lanchas y motos de agua en las costas de lagos y playas aumenta considerablemente y se está trasformando en uno de los hobbies preferidos para cientos de veraneantes durante esta época del año. De hecho, el alza en las importaciones de estos productos en los últimos dos años confirma este auge. 

Según Jonathan Pérez, presidente del club de motos de agua, entre el año 2011 y el 2012 se ha visto un aumento entre los que disfrutan de este tipo de embarcación y varios de estos nuevos fanáticos son parte de esta agrupación. El club al que pertenece tuvo un crecimiento claro en la última temporada, "se ha visto un aumento de un 30%  en quienes practican este deporte y les gusta el hobby de las motos de agua". 

Pérez añadió que el rango de edades se ha extendido para el uso de las embarcaciones, "van desde los 12 años hasta los 45 años quienes se suben a una moto de agua".

Matías Gutmann, representante de IT&B en Chile, asegura que en la temporada de verano pasado creció la cantidad de clientes interesados por adquirir lanchas. "El año 2010 hubo un aumento en las ventas de lanchas usadas importadas directamente en un 35%, incluso habiendo sucedido el terremoto que del 27-F", aseguró Gutmann.

En IT&B se pueden encontrar lanchas usadas desde los  $6 millones y medio en adelante, mientras que una moto de agua usada desde $1 millón y medio. Ésta última se ha convertido, según Gutmann, en la más vendida debido a que su precio y mantención es más económica. A pesar que cada una de ellas tiene funciones distintas para los usuarios.

La misma tónica es la de la tienda Sportbas, en donde se nota un aumento en las ventas de un 25%, siendo las lanchas las más preferidas en este caso.  Asimismo se ha notado el ingreso al mercado de cruceros pequeños, los que han llamado lentamente  la atención de los clientes.

"La gente no conoce tanto los cruceros, pero de a poco se han ido integrando al mercado en Chile, nosotros tenemos desde los $10 millones en adelante. Tienen una capacidad entre 4 a 6 personas. Lo bueno es que permiten quedarse navegando por unos días, a diferencia de las lanchas", manifestó Gutmann.