El silencio de Jara
El debate de esta semana fue un momento deprimente. Se reunieron las candidatas y candidatos a la Presidencia y según los organizadores de Archi fueron 4 millones y medio quienes los siguieron a través de mil radios en el país.
¿Por qué deprimente? Porque escuchamos frases ofensivas de la derecha sobre los derechos humanos, detenidos desaparecidos y el fin de la cárcel de Punta Peuco propuesta del Presidente Boric. Escuchamos los gritos y aplausos de las barras festejando cada vez que Kaiser decía que era venganza el Plan de Búsqueda, y que estaban cansados de pagar indemnizaciones por exonerados políticos falsos. Lo escuchamos decir que cerraría el capítulo de los años 73-90 (imagino que lo someterán a algún debate parlamentario) y que esta venganza llamada derechos humanos la encabeza el Partido Comunista que está en el Ministerio de Justicia y en el Servicio Médico Legal. Nuevamente, aparecía la barra aplaudiendo a rabiar.
Han pasado 50 años de la mayor tragedia que puede vivir una sociedad: un golpe de Estado y su consiguiente muerte y persecución política. Entre vecinos se denunciaron, se asesinaron a personas (niños incluidos) porque pertenecían a bandos distintos. Se organizaron caravanas de la muerte que recorrieron el país fusilando a otros chilenos sin juicios ni derecho a defenderse. Años después emergieron a la luz las fosas comunes en Pisagua, mientras en Lonquén aparecieron los cuerpos cubiertos de cal escondidos en minas abandonadas.
Los más irreverentes y descarados se permiten celebrar con aplausos la muerte, la persecución y se burlan de los desaparecidos y sus familias. Están envalentonados porque sus candidatos por fin les confirman sus falsas creencias: el tema de los DD.HH. es una invención de los comunistas o los más izquierdistas. Cuando se le preguntó a Matthei en el debate sobre la venganza que ella declaró representaba el Plan de Búsqueda, dijo que no lo pensaba así, que quería representar a otra gente… pero que estaba politizado. Desde el fin de la dictadura, todos los gobiernos han trabajado por fortalecer el respeto a los DD.HH. En el programa de la Pdta. Bachelet para 2014-2018 había un capítulo especial.
La candidata de centroizquierda guardó silencio sobre el tema en el debate. No defendió como se podría esperar lo realizado estos 50 años para cuidar la memoria y evitar el manoseo del tema por la desinformación. O evitar que lo sigan convirtiendo en el combustible para el ánimo de barra brava que cunde en la política. La candidata Jara tampoco defendió el Plan de Búsqueda del gobierno. ¿Debe su candidatura ser heredera de la tradición en la defensa de derechos humanos post dictadura? Por supuesto que sí. ¿Tendrá también esa candidatura la estrategia de no entrar en debates llamados valóricos y solo hablar de mamografías, escudos fronterizos, cárceles flotantes o drones fronterizos?
La coherencia de los liderazgos se juega en estos momentos y no con más asesores, cuñas o frases hechas. Tampoco si se milita o no en tal o cual partido. Importan los gestos claros que marcan diferencias sobre temas fundamentales que, aunque contraten miles de bots, no será silenciado.
Por Paula Walker, profesora Magíster de Políticas Públicas, Universidad de Chile
Lo último
Lo más leído
1.
4.
5.