Guía de compostaje para principiantes

¿El encierro te hizo tomar conciencia de toda la basura que generas? Este método permite reducir los desechos orgánicos y generar un abono natural para tu tierra. Aquí, cuatro expertos entregan sus consejos para empezar a realizarlo en casa.




Abres un paquete de galletas. Envoltorio. Te comes una manzana. Botas el corazón. Llega el medio día, cocinas la última taza de arroz que te queda: desechas el paquete. Te haces un huevo frito, botas la cáscara. Y así. Todo lo que comemos, parte de ese algo, siempre termina en la basura, sea su envase o una parte del alimento que no es comestible. Es un loop que podría tener otro destino si es que te lo propones.

Probablemente, durante este encierro adquiriste cierta conciencia de la cantidad de deshechos que puedes llegar a generar en tu casa al día, a la semana y al mes. Es una cantidad impactante, lejos de ser menor, pero sin embargo podría ser mucho más baja si conocieras el mundo del reciclaje y, sobre todo, del compostaje.

Conversamos con cuatro expertos sobre compostaje, sus bondades, beneficios y las razones de por qué debiésemos incursionar en esta aventura sustentable.

¿Qué es el compostaje?

Nuestras vidas tienden a la rapidez y lo que provocó la pandemia fue una pausa en medio del caos. Para muchos, el encierro ha provocado una revaloración del espacio, del tiempo y de nuestros intereses, y es precisamente por eso que el compostaje es una alternativa positiva de conectarse con la tierra y el medio ambiente.

“El compostaje es un proceso natural en el que la materia orgánica se transforma en tierra para alimentar a un futuro ser vivo vegetal”, explica Álvaro Pineda, arquitecto y fundador de Sr. Compost. Su emprendimiento, que además de vender composteras y artículos relacionados a esta dimensión, tiene la opción gratuita de dejar los residuos orgánicos en un punto público de la ciudad para luego ser compostado por él con diferentes técnicas.

“No es un invento humano, nosotros sólo podemos controlarlo y usarlo a nuestro favor”, apunta Pineda. Para realizar compost, cabe tener en cuenta que se necesitan 4 elementos principales: oxígeno, agua, nitrógeno y carbono. El profesional explica que el nitrógeno es “todo lo que es verde, por ejemplo cáscaras y restos de verdura”, mientras que el carbono corresponde a “lo que proviene de la celulosa, madera y hojas secas de árbol”. El agua se incorpora tal y como la conocemos y el oxígeno llega al revolver esta mezcla.

Los efectos del compostaje

Al compostar, “disminuyes en un 50 hasta un 80% tu nivel de basura. Y mientras mejor te alimentes, tu basura orgánica aumentará y disminuirán tus envoltorios”, explica Pamela Bravo, ingeniera comercial y fundadora de Compostera.cl, emprendimiento que durante diez años se ha dedicado a promover este cambio de paradigma en relación a los deshechos.

Con el compostaje, “más allá de deshacerse de ellos mediante una bolsa negra, podrás generar abono para tus plantas, tu huerto y dejamos de contaminar en el relleno sanitario”, afirma Bravo. Su opinión se complementa con la de Carolina Muñoz, fundadora de Lombricompostalk, emprendimiento en el que fomentan la gestión de residuos de forma ecológica.

Carolina explica que hay dos grandes impactos al reciclar los residuos orgánicos: por un lado, “tenemos un impacto ecológico, ya que si enviamos nuestros residuos al vertedero estos generan gases como el dióxido de carbono y el metano, que son altamente contaminantes y que afectan al cambio climático”. Y por otro lado, existe “un impacto económico, ya que podemos fabricar abonos y fertilizantes de excelente calidad con nuestros propios residuos a costo 0, devolviendo a la tierra lo que es de la tierra”.

Lo principal: atreverse

Uno de los grandes prejuicios que rondan al compostaje es el espacio, un mito que en parte es falso, ya que hoy en día existen distintas alternativas. “Todos podemos compostar, no tienes por qué tener un patio o una casa grande”, comenta Bárbara Lewin, fundadora de Vuelta Verde, emprendimiento que se enfoca en el retiro y reciclaje de desechos vegetales de jardín. También se dedican al compost y la comercialización de una vermicompostera, a la que ella califica como el “Ferrari” de este tipo.

“La idea es que cada uno busque qué sistema es el que le acomoda”, dice Lewin. “No es que uno funcione y los otros no. En compostaje hay ciertas formas y en vermicompostaje hay otras, tanto para una casa como para un departamento. Aquí hay parrilla suficiente para todos”, comenta.

“Mi mayor consejo es atreverse. ¿No tienes compostera? Hazte una artesanal. Parte de a poquito”, apunta Lewin, ya que al partir “uno se empieza a enamorar de este mundo”.

Conocimientos básicos del procedimiento de un compostaje

No es llegar y mezclar en un recipiente. El compostaje requiere conocimientos, tiempo y paciencia. En primer lugar hay que diferenciar los tipos de residuos, los que según Carolina Muñoz se pueden clasificar en dos grandes grupos: “los residuos nitrogenados o húmedos, que pueden ser restos de frutas y/o verduras, y que contienen agua, y los residuos marrones o secos, como restos de poda seco, hojas secas, cartón sin tinta, papel, o restos de madera sin tratar”.

Para compostar, Álvaro Pineda afirma que “necesitas una parte de residuos orgánicos, tres partes de hojas secas o cartón no brillante picado muy fino, una regadera para verter agua en forma de lluvia y un rastrillo pequeño para revolver”. También menciona que “la cantidad de materia seca debe ser 3 veces más que la de materia ‘verde’”.

El contenedor que se use es a elección de cada uno. Sin embargo, la ventilación es clave. “Debemos considerar que tenga un buen drenaje para que salga el exceso de agua”, apunta Muñoz.

“Partir solo con restos de fruta, verdura, cáscara de huevo, té y café. Todo bien mezclado y trozado en pequeñas partes”, sugiere Pineda, además de revolver religiosamente “todos los días para inyectar oxígeno”.

El contenedor o canasto aireado “debe estar en un lugar donde llegue sol la mitad del día, o puede estar siempre a la sombra”, comenta Pineda sobre el proceso de compostaje. “No se debe agregar tanta agua, solo la necesaria para que se vea húmedo”. La cantidad de agua depende del asoleamiento, la época del año y lugar donde se está compostando.

El recipiente o canasto que ocupes puedes construirlo tú mismo o puedes comprar uno. Lo importante es que se adapte a tu espacio y te sientas cómodo con el sistema. Existen un sinfín de tutoriales en YouTube con los que te puedes guiar para construir una compostera.

Este, por ejemplo, es uno que crearon desde Compostate Bien, en el que lo construyen con tres baldes:


Resguardos

Otro aspecto importante es el olor. Pamela Bravo explica que si aparecen mosquitas es “porque hay ‘olor a comida’ y eso se puede evitar siempre dejando cubierta la materia orgánica al depositarse”. Es decir, “ya sea con el sustrato que se va generando, con hojas secas, aserrín o incluso con una hoja de diario extendida”, recomienda Bravo como truco para que las moscas no se apersonen a tu compost. En específico, Sr Compost identifica a esta mosca como chichera, “una mosquita muy pequeña que busca el vinagre y azúcar de las frutas”.

En cuanto al olor en sí, Pineda explica que “mientras el residuo orgánico tenga oxígeno, no habrá mal olor”; he ahí la importancia de revolver. “El mal olor es producto de la generación de gas, este gas se produce por la mala ventilación y el exceso de agua”, y a su vez esto va de la mano con los orificios que tenga la compostera.

“Un buen proceso de descomposición domiciliario no atraerá roedores ni otros animales, y eso conlleva no depositar comida preparada, como tampoco carne ni grasas ni huesos”, afirma Pamela Bravo.

“Si no estás revolviendo constantemente, y no haces bien la pega de dejar tapado con las hojas, es ahí donde se vuelve atractivo para otros bichos”, complementa Bárbara Lewin.

La paciencia da beneficios

Al conversar con estos especialistas pude identificar que el compostaje es una responsabilidad y para que no fracase se necesita disciplina y compromiso. Es similar a tener una relación, pero en vez de tenerla con un humano, es con la tierra. Como toda relación, necesitas un punto de inicio, tiempo y paciencia antes de ver los frutos.

El vermicompostaje, asociado a la descomposición con lombrices —que será abordado en otro capítulo— es un poco más rápido, porque la lombriz acelera el proceso. El compostaje, en cambio, es un poco más lento. Se necesitan al menos seis meses para ver grande efectos

“A muchos de mis clientes les cambia la vida una compostera, incluso son más felices al conectarse con el proceso de que tu basura se convierta en una tierra de muy buena calidad o en un gran fertilizante”, reflexiona Pamela Bravo, quien también lidera Mueve la Fecha, un podcast de educación ambiental accesible a todo el mundo a través de Spotify, YouTube, iTunes y iVoox.

Bravo también destaca que, si bien es un proceso complejo, tienes la oportunidad de “conectarte con el ciclo natural y nuestras raíces como humanos”, además de una forma para “controlar el estrés o distraerse de un mal momento”.

La disminución de los residuos orgánicos es otro punto importante a destacar, ya que es “el principal generador de gas metano en los rellenos sanitarios, que son los que han generado estos cambios climáticos en nuestro planeta”, puntualiza Álvaro Pineda.

¿Buscas información?

Si estás pensando en seguir este camino y necesitas más información te invitamos a seguir a nuestros entrevistados en sus cuentas de Instagram, donde de forma muy amable contestarán tus preguntas. En esta red social tienen gráficas explicativas con diversos tips y consejos sobre este tema y más: @compostera.cl, @lombricompstalk, @sr_compost y @vueltaverde

Con los conocimientos de estos entrevistados elaboramos una guía de compras en relación a productos asociados al mundo del compostaje.

Compostera de madera

Se trata de una compostera fabricada con madera, que permite reciclar y transformar tu basura orgánica. Esta madera fue tratada con aceite de linaza para que su vida útil sea más prolongada y tiene una capacidad de 175 Litros. Sus medidas son: 58 cm de largo, 58 cm de ancho y 88 cm de alto.


Compostera Darth Vader

Es un modelo canadiense, especial para el aire libre. Tiene una capacidad de 300 litros, es resistente a los rayos UV y cuenta con 10 años de garantía. El kit incluye un bastón aireador y un contenedor para residuos compostables de cocina, con capacidad 8 litros y de color beige. Medidas: 90 cm de diámetro en la base y 75 cm de altura.


Bokashera

La Bokashera es un contenedor hermético que precomposta el 100% de tus residuos orgánicos, incluso carne y cítricos. Usando el salvado de Bokashi, una fibra inoculada con microorganismos benéficos, podrás fermentar sin olores los residuos de tu cocina. No necesitas agregar agua, no necesita materia seca, no necesita supervisión ni oxígeno. Al ser un contenedor anaeróbico, tus residuos disminuirán a medida que agregues materia orgánica.


Compostera de plástico

Esta compostera de marca Ergo tiene dimensiones de 85x85x80 cm y es ideal para jardines.


Saco de compost de 25 Kilos

El compost que elabora Vuelta Verde es 100% natural y libre de malezas. Cumple con todos los pasos y madurez necesarios para poder garantizar un resultado óptimo en humedad, consistencia y nutrientes. Permite a plantas, césped y huertos desarrollarse en todo su potencial.


Humus de lombriz

Este es el fruto del vermicompost, el compostaje a base de lombrices. Este es un saco de 25 litros ideal para tu huerto y/o jardín.


Bastón aireador

Este modelo tiene una forma ergonómica perfecta que no requiere de mucho esfuerzo físico, ya que basta con introducir el bastón a la mezcla, girar y levantar.


Huerto Vertical

Este es un modelo de cinco cajones, los que pueden ser barnizados con color a elección. En su interior están reforzados con sellante para una mayor durabilidad de la madera. Las medidas de este modelo son 44 cm de ancho, 132 cm de alto y 22 cm de profundidad.


Bolsa compostable para residuos de mascota

Estas bolsas son especiales para que guardes la materia fecal de tu perro cuando lo saques a pasear. Son bolsas fabricadas a base de almidón de maíz. Una vez desechado se degrada completamente en 3 meses. Cada rollo contiene 15 bolsas.


*Todos los precios incluidos en este artículo están actualizados al 28 de julio de 2020.

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