La Tercera
9 ene 2024 08:33 PM
La improvisada forma en que la oposición llevó a cabo la acusación en contra del ministro de la Vivienda no solo representa un duro golpe para el sector, sino un desprestigio para la labor parlamentaria.
Dirigiendo un gobierno que a duras penas será como el más mediocre desde el retorno a la democracia, el pasado los asedia por la lenidad y la torpeza, en la falta de preparación, pero también en la contradicción de sus propios actos.
Resulta particularmente preocupante que ni el gobierno ni los parlamentarios adviertan las implicancias de sostener reuniones que podrían estar fuera del marco institucional, profundizando así la crisis de desconfianza.