Siete de cada 10 trabajadoras de casa particular han perdido su puesto en los últimos 12 meses, lo que las ha transformado en la actividad laboral más afectada por la crisis del Covid-19 en el país. Una realidad que choca con sus propias biografías de años junto a las mismas familias, de ver crecer a niños y ser confidentes de patrones que en este contexto de vacas flacas simplemente las despidieron. Muchas de estas mujeres se dieron cuenta de que ni siquiera tenían contrato.
Carlos Pérez y Rosario Mendía
31 jul 2020 06:00 PM












