Analgésicos y anorexia habrían gatillado repentina muerte de Brittany Murphy

Brittany Murphy lucía francamente delgada. Casi cadavérica, como se puede ver en un video que registró una de sus últimas apariciones y que subió ayer el sitio web TMZ. Desde 2005 que la actriz venía negando desórdenes alimentarios, pero tras su muerte -el domingo, producto de un paro cardíaco- las versiones de que sufría anorexia tomaron fuerza y la revista People habló de "abuso de ciertas sustancias" y de un gradual deterioro físico. Su madre, en todo caso, sólo reconoció que tenía diabetes tipo 2 y que las complicaciones de la enfermedad podrían haberla afectado. Por ahora, la única certeza es que la policía encontró en su casa en Los Angeles una gran cantidad de medicamentos y recetas médicas y que tenía una gripe que llevaba tratando varias semanas.

Las razones verdaderas de su deceso, en rigor, se sabrán tras la autopsia que se realizó ayer y cuyas resoluciones se conocerán una vez que la policía termine su investigación. Pero la prensa estadounidense habla de un comportamiento "alarmante y errático" en el último tiempo. Fue despedida de un filme de terror y en el rodaje de otra cinta de suspenso, llamada Something wicked, "se notaba casi ausente de las grabaciones", como dijeron fuentes citadas por la revista The Wrap. "En algunos momentos estaba consciente y en otros no, sufría desmayos, y todo en la mitad de las grabaciones", señalaron testigos a la publicación. Otras versiones que circularon ayer dicen que compartía la misma adicción de Michael Jackson: el abuso de analgésicos, incluido el Vicodin, tras problemas por una cirugía plástica.

"Habíamos estado muy preocupados de que algo así ocurriera. Brittany había estado viviendo en el límite. Definitivamente tenía un problema con las drogas y todos le rogamos para que buscara ayuda", señaló un amigo de la artista a The Mirror.

Hollywood quedó impactado y, fiel a estos tiempos, hizo saber su pesar a través de Twitter. "El mundo perdió un pequeño rayo de luz", escribió Ashton Kutcher en su página. "Tenía un gran talento", aseguró Lindsay Lohan. Dakota Fanning agregó: "Era como mi hermana mayor".

La actriz dejó cuatro películas filmadas por estrenar -entre ellas The expendables, de Sylvester Stallone-, aunque en los últimos años su carrera iba en declive. De hecho, su último trabajo importante data de 2006, cuando colaboró como una de las voces de la cinta animada Happy feet. Su carrera, que había despegado en 1996 como la amiga loser de Alicia Silverstone en Ni idea, tuvo su época de gloria entrando el año 2000. La suicida de Inocencia interrumpida, la novia que soporta a Kutcher en Recién casados y la testigo clave para Michael Douglas de Ni una palabra le cimentaron fama de actriz emergente. Una promesa que no alcanzó a cumplir.