Aránguiz le duele a Chile

Poco antes de las 18.00 de ayer, y cuando la atención estaba centrada en su ex compañero Johnny Herrera, llegó desde Alemania una de las peores noticias que pueden afectar a un jugador: Charles Aránguiz sufrió la rotura del tendón de Aquiles del pie izquierdo en el entrenamiento matutino del Bayer Leverkusen, el equipo por el que ni siquiera había debutado, luego de dos partidos en la banca.

El mediocampista se convirtió así en la peor noticia para su nuevo club y, además, para la selección nacional, que aún experimentaba la alegría de la obtención de la Copa América, logro en el que el puentealtino tuvo un papel estelar.

La madre del jugador reaccionó con natural tristeza ante la situación. "Hablé en la mañana con mi hijo y está con mucha pena. Me contó que se rompió el tendón de Aquiles en el entrenamiento, haciendo fútbol. Sé que ahora le están haciendo exámenes", explicó Mariana Sandoval. Lo más probable es que sea intervenido en las próximas horas. Su viaje a Chile no se descarta, aunque deberá esperar el período posoperatorio.

Larga rehabilitación

Una de las personas que mejor conoce la ficha médica de Aránguiz es Alejandro Orizola, médico consultor de la U. "Me acabo de enterar de tan mala noticia", comentó el prestigioso traumatólogo. "Él nunca tuvo problemas en esa zona (...) Habría que saber con más detalles cómo se produjo la lesión", matizó.

Orizola explica que el tendón de Aquiles es el más fuerte del cuerpo humano, el más importante, "porque eleva el talón para iniciar la marcha y soporta todo el peso de la tracción". Así, cuando se presenta una dolencia de este tipo, es imposible que el paciente pueda mover el pie normalmente. Frente a una rotura, la única solución es una intervención. "Hay muchas técnicas quirúrgicas, pero la finalidad es siempre la misma: unir los segmentos del tendón, lo que implica, en el caso de un futbolista, un período de recuperación de cuatro meses como mínimo".

El profesional puntualiza que "teóricamente puedes continuar con tu vida deportiva. Hay muchos ejemplos de deportistas que han podido hacerlo sin mayor problemas".

Sobre las causas, hay varias opciones. "Puede ser traumático, por sobrecarga, con tejidos de mala calidad o un tendón crónicamente tratado con corticoides", dice Orizola. Incluso, ni siquiera puede haber dolor previo para que se produzca.

Ahora, le espera un largo camino al Príncipe. Su reaparición está totalmente descartada para este año, por lo que se perderá los primeros cuatro partidos eliminatorios y en su club, en principio, comenzaría a trabajar en enero próximo. En cualquier caso, Aránguiz es un tipo de esfuerzo y optimista. "Tengo esperanzas de que todo saldrá bien para mí", dijo al llegar a Leverkusen. No fue así, pero tampoco es la primera prueba fuerte que enfrenta en su carrera.