Argentina decide defender empresas nacionalizadas por Hugo Chávez
<P>El ministro del Interior, Florencio Randazzo, dijo que se harán "todas las gestiones para defender los intereses argentinos" y buscará la indemnización correspondiente.</P>
En una decisión que podría generarle roces con el gobierno venezolano, el gobierno argentino señaló ayer que defenderá los intereses de las empresas nacionalizadas por Hugo Chávez. Así lo señaló el ministro del Interior, Florencio Randazzo, quien agregó que el gobierno argentino hará "todas las gestiones para defender los intereses argentinos". En declaraciones a Radio 10, Randazzo reconoció que el Ejecutivo de Cristina Fernández de Kirchner "no tenía ningún dato de esta decisión", porque el Presidente venezolano, durante su reciente visita al país, "no ha comentado absolutamente nada".
Chávez decidió nacionalizar tres empresas siderúrgicas argentinas, algo que fue tomado como una medida que causó sorpresa en el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Por tal motivo, los empresarios le reclamaron a la Presidenta argentina que interceda ante su par venezolano para evitar este tipo de hechos. Así, el gobierno argentino hará -a través de la Cancillería- un reclamo formal a Venezuela, para saber qué alcance comprende la medida adoptada por Chávez.
El año pasado, Chávez nacionalizó Sidor, también subsidiaria de Techint (la empresa afectada en las recientes nacionalizaciones), y tras una compleja negociación del gobierno, la indemnizó con un pago de US$ 1.970 millones.
El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, centralizará la negociación con Chávez por las tres empresas nacionalizadas de Techint: Tubos de Acero de Venezuela (Tavsa), Materiales Siderúrgicos (Matesi) y Complejo Siderúrgico de Guayana (Consagua). Si bien se respetará "la decisión soberana" de Chávez -quien no retrocederá en su postura-, lo que buscará el gobierno nacional será una indemnización.
"El gobierno repetirá sin dudar las gestiones de la misma forma que lo hizo ante la nacionalización de Sidor, respetando como ha hecho siempre las decisiones soberanas de otros estados, pero protegiendo los intereses de los nacionales", apuntó De Vido en unas declaraciones a la agencia oficial de noticias argentina Télam.
La decisión de Chávez fue rechazada por las asociaciones empresariales argentinas y hasta por la Confederación General del Trabajo, el mayor sindicato del país.
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