Chileno, capitán de barco mercante danés, lleva 52 días secuestrado por piratas somalíes

Oñate fue informada por un amigo de su esposo sobre el secuestro. López capitán de la nave, propiedad de la naviera danesa Shipcraft, era parte de la tripulación de seis personas que había sido raptada, según reconocieron ese día miembros de la empresa.

A contar de ese momento, y por petición del gobierno danés y de la armadora Shipcraft, la familia había guardado total silencio. Sin embargo, tras dos meses sin avances, piden la intervención de las autoridades chilenas. "Fue terrible. Quiero que el gobierno nos ayude. Eddie tiene nacionalidad danesa, pero es chileno", dice la mujer.

El capitán del mercante, oriundo de Valparaíso, salió de Villa Alemana el 5 de septiembre para navegar por tres meses y regresar en enero a descansar junto a su familia.

Junto a un danés y cuatro filipinos navegaba de Omán a Jordania con una carga de explosivos y, según algunas versiones, desechos nucleares radioactivos, cuando a mil kilómetros de Somalia fueron emboscados por al menos dos lanchas pequeñas en las que se movilizan los plagiadores.

Según él mismo contó a su familia, cuando eran abordados lograron detener el motor de la nave y refugiarse en una bodega tras una puerta de metal. Sin embargo, los tripulantes debieron ceder ante la presión de los piratas que armados con bazucas y ametralladoras los hicieron salir del lugar amenazándolos con un soplete, relató su hermana Jocelyn López.

"Hablé con él el 12 de enero, porque venía mi cumpleaños. Cerca de las tres de la tarde hora de Chile me llamó. Me dijo que piratas andaban merodeando el barco y que me tenía que cortar. Pero lo tiraba a la chacota porque era común que aparecieran", cuenta.

A raíz de los constantes ataques que sufren naves en ese lugar, la compañía había embarcado a cuatro vigilantes -que por ley no pueden ir armados-, sin embargo en Omán estos dejaron el barco. Alertados por el botón de pánico que activó el marinero chileno, fuerzas turcas de la OTAN hallaron el Leopard cuando navegaba a la deriva, sin la tripulación.

"Nuestra preocupación es averiguar cómo está la tripulación y traerla a casa. Pero la situación actual es que no estamos en posesión de información confirmada sobre dónde se encuentra", dijo en un comunicado Claus Bech, director de la armadora danesa a dos días de ocurrido el secuestro.

Hace dos semanas el embajador y el cónsul de Dinamarca en Chile visitaron a la familia de López en su casa de Villa Alemana. El embajador les comentó que la cifra pedida por los secuestradores es "inimaginable" y que "desde el 9 de febrero que la naviera no ha tenido contacto con el barco", dice Oñate.

Autoridades chilenas manifestaron que la familia no ha hecho ninguna petición formal de ayuda, y si ella no se realiza no podrían actuar. En tanto, el embajador de Dinamarca, Lars Nielsen, dijo que no tenía "ningún comentario al respecto".