Cómo perder 1/2 kilo de grasa en una semana y no dejarse llevar por los mitos de las dietas

<P>La Clínica Mayo postula reducir la ingesta diaria en 250 calorías y quemar otras 250 con ejercicios.</P>




¿Sabe cuántas calorías debe reducir para perder medio kilo de grasa? 3.500 y lo saludable es hacerlo en una semana como mínimo para que lo que se pierda sea grasa y no agua o musculatura.

Así lo explica el manual de la Clínica Mayo "Mi solución al peso", que propone un programa completo, con el paso a paso, para bajar de peso de forma permanente y mantiendo los hábitos adquiridos de por vida.

Kristine R. Schmitz, nutricionista de la Clínica Mayo, explica a La Tercera que es muy importante partir por no ver la baja de peso como una "dieta", pues lo que se busca es que "la gente haga cambios permanentes en su forma de comer. Preferimos que hagan cambios muy pequeños, pero definitivos, y que mejoren su calidad de vida, en vez de cambios radicales que jamás van a mantener", dice.

Por eso la apuesta de la Clinica Mayo, una de las más prestigosas del mundo, es realizar un plan que busca bajar 500 calorías al día (3.500 a la semana) por medio de la inclusión de "alimentos ricos en fibra y agua, como frutas y vegetales, además del incremento de la actividad física", dice Schmitz.

Para esto es importante partir por saber qué alimentos preferir, razón por la que la Clínica Mayo tiene su propia "Pirámide de peso saludable", que tiene por base a verduras y frutas (consumo ilimitado), luego los carbohidratos (cuatro raciones diarias, siendo éstas del tamaño de una pelota de tenis), proteínas y lácteos (3), grasas (3) y dulces, de los que se pueden consumir hasta 75 calorías al día. Esto para lograr una ingesta diaria de 1.200 calorías, dato que sirve para estar bien informado, no para tener como meta.

Es que la clave de la pérdida de grasa no está en las calorías, sino que en reemplazar la densidad de energía de lo que comemos, es decir, cómo logramos comer en mayor cantidad aquellos alimentos que tengan menos calorías. Así, por ejemplo, si un plato de espagueti con salsa de queso tiene 646 calorías, una taza de pasta de trigo entero, con una salsa hecha con tomates naturales y verduras, sólo 360. Se come una mayor cantidad, pero se consumen menos calorías. Es decir, sin "morir" de hambre e incorporando rutinas simples de ejercicios se pueden generar cambios que, sostenidos en el tiempo, tienen resultados permanentes y restan grasa a nuestro cuerpo.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.