Crecen sicarios adolescentes en México

La violencia destada por el narcotráfico en México ha visto crecer explosivamente no sólo el número de asesinatos en ese país, sino también los sicarios menores de edad. Las principales bandas están recurriendo a ellos como asesinos a sueldo porque, según las autoridades mexicanas, se les puede pagar menos y si son capturados reciben penas más bajas que los adultos. "Es una mano de obra que está al alcance y es de fácil uso y desecho", señaló a la cadena británica BBC Martín Barrón, experto del instituto de Ciencias Penales de México. Este año la Procuraduría General de la República ha desbaratado al menos tres bandas de sicarios donde participaban adolescentes, dos de ellas vinculadas a los Zetas, uno de los más violentos grupos de narcotraficantes mexicanos. Según señaló a la BBC el director del Centro Binacional de Derechos Humanos de Tijuana, Víctor Clark, los jóvenes sicarios provienen de comunidades pobres y con altos índices de violencia intrafamiliar. "No se les paga mucho, entre US$ 300 ó US$ 400 a la semana. Los entrenan para el uso de armas y les dan vehículos", dice, aunque la mayoría -según Clark- muere en enfrentamientos con bandas rivales.