Crecer en sectores acuícola y turístico: la ruta de navegación de los Kochifas
<P>A más de un año de la muerte del fundador Constantino Kochifas, la empresa familiar, con ventas por US$ 20 millones en 2010, prepara su expansión a la XII Región, con la industria salmonera y evalúa comprar otro crucero. </P>
Constantino Kochifas, creador de los cruceros Skorpios en el sur de Chile, soñaba con que su familia continuara con sus negocios cuando él ya no estuviera. A poco más de un año de su muerte, su familia ha cumplido con esa ruta de navegación y hoy se prepara para crecer no sólo en la actividad turística, sino principalmente en el área del transporte acuícola, de la mano del resurgimiento de la industria de los salmones, fuertemente golpeada por el virus Isa.
Su hijo Constantino Kochifas, el segundo de seis hermanos, es quien encabeza ahora el grupo de tres compañías -Transmarko, Turismo Skorpios y Astilleros y Maestranza Kochifas-, desde la gerencia general. En las labores directivas lo acompaña su madre, Noemí Coñuecar (82 años), en la presidencia.
En sus oficinas centrales en Puerto Montt, Kochifas cuenta que tras la muerte de su padre debieron reorganizarse. "Ha habido muchos cambios . No ha sido fácil asumir la dirección de esta empresa. Estábamos acostumbrados a tener un padre líder, con experiencia en todas las áreas (...). El trabajó hasta el último día; murió en su barco", dice.
El ejecutivo ha estado vinculado al grupo familiar por 35 años. Hoy su gestión está enfocada en incrementar el patrimonio familiar, que incluye dos barcos de turismo -con capacidad para 110 y 130 pasajeros cada uno-, y 28 embarcaciones de carga. Además, tiene terminales marítimos propios en Puerto Montt y Puerto Natales, para su flota y la de terceros, junto a un complejo termal en Quitralco -al sur del fiordo de Aysén- incorporado al circuito turístico. Sus ventas, que en 2003 llegaban a US$ 5 millones, en 2010 cerraron en US$ 20 millones. De ellos, 65% proviene de Transmarko, 25% de los cruceros y 10% de Astilleros y Maestranza Kochifas, que construye y mantiene barcos, y presta servicios a terceros. Lejos está 1978, en que partieron con los cruceros, y éstos representaban 90% de sus ingresos anuales.
Transmarko, en particular, está enfocado en la industria acuícola, entre la X y XI Región. Transporta alimento de pescado, smolts, cosecha y estructuras para balsas-jaulas. Hoy trabaja con unos 30 clientes y su capacidad de flota es de 15 mil toneladas de carga a flote. En este segmento está entre las dos primeras firmas a nivel nacional y ha invertido US$ 10 millones en los últimos cinco años.
Con el renacer de la salmonicultura vendrán tiempos de crecimiento. Las ventas, de hecho, se podrían incrementar entre 10% y 12%, considerando las regiones X y XI, en tres o cuatro años. "Eso requerirá de nuevas inversiones de naves, de dos o tres barcos más para carga general. En 2012 quizá aumentemos en 10 mil toneladas más de transporte", precisa Kochifas. ¿El costo? US$ 4 millones.
En 2008, la crisis del virus Isa, que afectó la producción salmonera, tuvo su impacto en el negocio: el grupo pasó de operar 28 barcos a trabajar con 16 embarcaciones. Debió, asimismo, reducir personal y en 10 meses dejó de transportar las más de 30 mil toneladas de alimento al mes que solía movilizar y se redujo a siete mil toneladas. "La facturación, de entre US$ 7 millones y US$ 8 millones, bajó a la mitad", recuerda. Pero en el segundo semestre de 2010 se vieron los primeros signos de reactivación y recién en abril de este año los buques más grandes alcanzaron el 50% de su capacidad. Kochifas calcula que estarán a full capacidad entre marzo y abril de 2012. A modo de resumen, afirma que este año "fue de estabilización. Ahora la industria está creciendo, da tranquilidad para poder invertir".
En ese escenario, el plan considera una nueva meta: arribar a la XII Región, siguiendo la evolución de la industria salmonera. Ese plan podría concretarse en un año y medio. Según Kochifas, ya tienen algunas ventajas, como poseer un terminal portuario en Puerto Natales, que se comenzó a construir en 2003 y donde invirtieron US$ 3,5 millones.
"Queremos ser actores importantes. Tenemos mucha confianza en que la industria va creciendo. Mi padre decía que entre Puerto Montt y Puerto Natales se podía transportar ocho millones de toneladas y vamos en 500 mil", añade.
En transporte de carga a nivel nacional poseen además una ruta a Juan Fernández, la que operan desde 2009 y que buscaron "cuando estaba mal la parte acuícola", explica el ejecutivo. Ahí movilizan, en promedio, 280 toneladas mensuales y una docena de pasajeros por mes. Y les interesa conservarla.
Con seis mil pasajeros movilizados al año, entre las rutas de Laguna San Rafael y Kaweskar, el objetivo es que Turismo Skorpios pase de ser el 25% de las ventas a un 40% "en no más de tres años", indica. Su plan apunta a concretar esa meta incorporando una nueva nave turística de acá a 2014. "Estoy pensando en otra ruta o en reforzar una de las que ya están", adelanta.
A diferencia del negocio acuícola, las inversiones en este sector dependerán de que estén dadas las condiciones de mercado, advierte. Uno de los temas que le preocupa es el proyecto de casinos en cruceros internacionales, próximo a convertirse en ley, que permitirá la operación de los casinos de juegos a bordo de las embarcaciones turísticas extranjeras mientras navegan en aguas territoriales chilenas.
"No es efectivo que los cruceros no recalen porque no tienen casino. Es un tema de mercado. Lo que se hace hoy, de abrir los casinos a extranjeros, es una discriminación. Pero estamos esperanzados en que se favorezca a los nacionales en otras medidas. De lo contrario, la industria nacional no es viable", considera Kochifas. Y agrega: "Es preocupante que las autoridades no se den cuenta del daño que le están haciendo a la industria nacional".
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.