Cristina K dice que perdió un hijo con seis meses de embarazo en 1984

Lo que era una ceremonia protocolar, se transformó en un mea culpa con una sorpresiva revelación. La Presidenta argentina, Cristina Fernández, aprovechó el acto en que promulgaba la nueva ley antitabaco para relatar su lucha personal para dejar el cigarrillo y las consecuencias que tuvo en su vida. Así, la mandataria confesó que hace 27 años y con seis meses de embarazo perdió un hijo por ser fumadora.

La nueva ley que rige en Argentina prohíbe fumar en todos los ambientes públicos cerrados, además de restringir la venta de los cigarrillos.

"Yo durante cinco años fumé dos atados (cajetillas) por día y mi compañero (el ex Presidente Néstor Kirchner) llegó a fumar cuatro. Vos, Alicia (señalando a la hermana del fallecido ex mandatario), fumabas tres. La familia venía mal, íbamos mal", recordó la mandataria en la ceremonia realizada esta semana en la Casa Rosada.

Según relató el diario Perfil, de Buenos Aires, los funcionarios y colaboradores de su gobierno presentes no daban crédito a lo que escuchaban, ya que estaba contemplado que la mandataria sólo explicara de qué trataba la nueva ley antitabaco.

"Traté durante cinco años volver a quedar embarazada, pero no quedaba. Dejé de fumar el 31 de diciembre de 1988 y en noviembre de 1989 quedé embarazada de mi hija Florencia. No sé si habrá tenido que ver, pero está en la estadística de probabilidades", dijo la presidenta.

Según contó Cristina Fernández, el día antes de dejar el cigarrillo no paró de fumar durante todo el día. "Fumé uno tras del otro y a partir de allí nunca más toqué un cigarrillo en mi vida. En ese sentido, tuve una disciplina prusiana desde que supe que estaba embarazada, nunca más toqué un cigarrillo, hasta que nació. Todos apostaban a que no iba a aguantar".

Entonces, la jefa de Estado contó la pérdida de su hijo. "Y no era como ahora, que la neonatología te salva a los chicos, en aquel momento no estaba tan adelantada la ciencia y perdí un varón". Eso sí, aclaró que "durante el embarazo de Máximo (su hijo mayor de 34 años) jamás toqué un cigarrillo".

Cristina también relató que su marido dejó de fumar en 1992. "El no tragaba el humo, lo expedía todo. Vivía envuelto en humo, con los dedos amarillos y el olor a la ropa". Ahora pretende que sus dos hijos, Máximo y Florencia, también dejen el hábito: "Estoy tratando de que las dos personas que más amo dejen de fumar".