Cristina K lanza su más dura ofensiva contra Clarín y La Nación por caso de papelera

<P>La Presidenta denunció irregularidades en la compra de Papel Prensa por parte de ambos diarios en 1976.</P>




En la mayor ofensiva del gobierno de los Kirchner contra los dos principales diarios transandinos, la Presidenta Cristina Fernández dio a conocer ayer los detalles de un informe sobre Papel Prensa, la compañía que, según la versión de la Casa Rosada, fue vendida en 1976 a los periódicos Clarín y La Nación de manera forzada.

La acusación, que forma parte de un largo enfrentamiento del gobierno de Cristina K. con la prensa escrita, fue rechazada por estos dos medios.

En un largo discurso frente a los empresarios de la Unión Industrial Argentina -muchos de los cuales no asistieron a la presentación-, la mandataria llegó a decir que ambos diarios recurrieron a "delitos de lesa humanidad al apropiarse ilegalmente" de esa empresa, la principal fabricante de insumos para periódicos. De esta manera, señaló que la justicia tiene la última palabra sobre el caso y agregó que enviará un proyecto de ley al Congreso para que se declare de "interés público" la producción de papel y para crear una comisión que vote un marco regulatorio y participe en las reuniones de directorio de Papel Prensa.

Esta compañía, que abastece de papel a más de 170 clientes en todo el país, pertenecía al banquero David Graiver, muerto en confusas circunstancias en 1976. Tanto la viuda de Graiver como otros familiares sostienen que fueron obligados a desprenderse de sus acciones en el marco de la connivencia entre el poder civil y militar. Así, el gobierno ha acusado a La Nación y Clarín de ser cómplices de los líderes militares para apropiarse de Papel Prensa."Quien controla Papel Prensa, controla hoy por hoy la palabra impresa en Argentina", dijo Cristina K durante la presentación del informe.

Por su parte, ambos diarios han calificado el caso como "inconcebible hasta en las especulaciones más maquiavélicas".

"Los Graiver estaban libres: no habían sido secuestrados, ni torturados ni amenazados por la dictadura gobernante", indicaron ambos medios. Además, los diarios aludidos señalaron que "toda la historia fue inventada por el gobierno", con el fin de quedarse con Papel Prensa. Tras el discurso de Fernández, Clarín dijo que se trata de la ofensiva "más osada" contra los medios.

Desde que llegó al poder, en 2007, Cristina Kirchner ha tenido una difícil relación con los medios de su país. La mandataria ha dicho en reiteradas ocasiones que parte de la prensa intenta debilitar su gestión y que los grandes conglomerados ignoran lo positivo de su gobierno. También los ha acusado de ser "cuasimafiosos". Especialmente tensa ha sido la relación entre el gobierno y el Grupo Clarín, producto de una ley que establece límites estrictos para impedir la concentración de la propiedad de los medios.

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