Cristina Marcano y Alberto Barrera: "Sería prematuro decretar la agonía del chavismo aun con Chávez fuera de combate"

<P>Según los autores del libro <I>Hugo Chávez sin uniforme</I>, el mandatario sigue en campaña para las elecciones de 2012.</P>




Autores del libro Hugo Chávez sin uniforme (2005), la más completa biografía que se ha publicado sobre la figura del Presidente venezolano, el escritor Alberto Barrera y la periodista Cristina Marcano respondieron las preguntas de La Tercera en relación con la enfermedad del mandatario y la nueva situación política que enfrenta ahora el país.

Basándose en su experiencia, ¿cómo vio a Chávez al hablar de su enfermedad?

Cristina Marcano CM : Lógicamente, un diagnóstico de cáncer es deprimente para cualquiera, pero creo que en el caso de Chávez, que se creyó un súper hombre, la depresión debe verse agravada por una nueva conciencia sobre su vulnerabilidad y el temor de verse alejado del poder. A eso se suma el hecho de que la enfermedad le arruinó los festejos del Bicentenario de la Independencia, que se celebra el 5 de julio, en los cuales puso especial empeño porque es un hombre fetichista de las fechas históricas. Estamos hablando de un hombre que se soñaba en el poder hasta 2030. En cuanto a las elecciones, hay que esperar. No tenemos suficiente información sobre el pronóstico de los médicos en relación con la evolución de su enfermedad.

¿Cuán grande es la influencia de Fidel Castro y cuánto había de él en el discurso del jueves?

Alberto Barrera AB : Es muy difícil establecer la influencia de Fidel en Chávez. Ambos son políticos hábiles. Chávez desde hace tiempo ha trabajado por ocupar el rol de Fidel cuando este muera. Para Chávez ha sido muy ventajosa, en el ámbito de cierta legitimidad internacional, su relación con Fidel. Para Castro, Chávez ha significado una suerte de resurrección. Yo no creo que Chávez cumpla un estricto guión de Fidel, pero sin duda lo escucha y sigue algunos de sus consejos. Fidel es un modelo a seguir: tiene más de 50 años en el poder y todavía algunos, en ciertas partes del planeta, no lo consideran un dictador.

¿Por qué cree que leyó el discurso?

Creo que por dos cosas: por temor a quebrarse y por recomendación de Fidel Castro. Fue un discurso emotivo pero muy racional, en el que se dejaron abiertas varias incógnitas: ¿De qué tipo de cáncer se trata, dónde estaba localizado el tumor, en qué consiste el tratamiento, cuándo regresará al país? Un hermetismo muy cubano.

¿Quiénes podrían suceder a Chávez? ¿Es una figura muy acaparadora o ha dado espacio para otros liderazgos como el de su hermano Adán?

Chávez es muy personalista. Durante todos estos años ha desarrollado una inmensa campaña nacional e internacional alrededor de su persona. No ha permitido el surgimiento de un liderazgo que pueda sustituirlo. Pero su caso familiar es muy diferente al de los hermanos Castro en Cuba. El control familiar del poder en Cuba es militar. Pero en Venezuela, Adán es un civil, uno más en medio de las peleas internas que hay dentro del partido oficial. Eso marca una gran diferencia. Por otro lado, la Constitución no permite expresamente que un Presidente pueda pasarle el poder a un hermano.

Algunos afirman que se radicalizarán las acciones contra la oposición.

El mensaje de ahora ha demostrado que Chávez, aun estando enfermo, sigue en campaña. El tiene la vista puesta en 2012 y en un país cada vez más difícil, con una realidad adversa. Dependiendo de su evaluación clínica, todo es posible. Pero es fácil suponer que usará melodramáticamente toda esta experiencia para reavivar su vínculo emocional con el pueblo y satanizar de nuevo a la oposición.

¿Cree que la era Chávez llega a su término?

Sería prematuro decretar la agonía del chavismo aunque el Comandante Chávez quedara definitivamente fuera de combate. A pesar de que es un movimiento fuertemente personalista, y también militarista, es la fuerza política más grande del país, ha logrado una maquinaria importante y tiene un profundo arraigo popular, construido a lo largo de 13 años. Seguramente perderá músculo sin su caudillo, podría debatirse en pugnas entre las distintas corrientes que luchan dentro del PSUV por el poder, pero no lo veo como un partido en extinción.

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