Dodge Dart: el regreso de una leyenda

<P>El grupo Chrysler lanza en Chile una nueva generación del Dart, un sedán mediano que nada tiene que ver con el aspiracional auto familiar que se fabricó a fines de los 60.</P>




Quizas porque el Dodge Dart sigue siendo una leyenda entre los conocedores y aficionados a los autos fabricados en la incipiente industria automotriz chilena de los años 60 y 70, es que Comercial Chrysler decidió lanzar la nueva generación de su modelo en las legendarias tierras de Chiloé.

Pero claro, como los años no pasan en vano, entre el espacioso y muy aspiracional modelo familiar fabricado en Arica casi medio siglo atrás y el modelo que se puede comprar desde este fin de semana en el país, hay un mundo de diferencia en diseño, tamaño, enfoque y equipamiento.

Sin embargo, la resurrección del nombre invita a la marca a atreverse a ejecutar una propuesta nueva, enfocada en un grupo de clientes que hasta ahora no encontraban respuesta a sus necesidades en el line-up del grupo americano.

Porque si la gama actual de Chrysler está enfocada casi en exclusiva en todoterrenos y vehículos de corte familiar, con el Dart suma hoy un modelo de corte deportivo, exquisitamente diseñado, de tamaño medio y con un precio de acceso muy respetable. Es cierto, no es el más barato del segmento, pero sí uno de los que están mejor equipados, como suele ser la tónica en la marca.

El Dodge Dart es el primer fruto real de la alianza entre Fiat y Chrysler, al ser desarrollado sobre la plataforma del Alfa Romeo Giulietta, extendida entre los ejes y en el ancho de vías, lo que le asegura un tipo de conducción deportivo.

Se trata de un sedán con un diseño muy atractivo, que mezcla la pasión y el estilo italianos con la fuerza y musculatura de Dodge. Mide 4,67 metros de largo y tiene 2,7 entre los ejes, lo que lo posiciona en la parte alta del segmento C.

Sus proporciones y postura aerodinámica recuerdan a un coupé, pero su habitabilidad y capacidad de carga son las de un sedán de un segmento superior. Destaca en su diseño la clásica parrilla cruzada de Dodge, aunque delicadamente unida a unos estilizados focos, así como un discreto alerón sobre el maletero, unas llantas aro 17, y una extensa franja luminosa trasera, heredada de los Dodge Charger y Challenger, y que está formada por 152 luces led.

En el interior cuenta con materiales suaves al tacto (aunque no de nivel premium) y asientos de tela bicolor con diseño deportivo. Al centro destaca el diseño de consola muy moderno y tecnológico, donde resalta una pantalla multifunción táctil de 8,4 pulgadas, desde donde se puede manejar el climatizador bizona, el teléfono, el sistema de sonido Alpine de 506 watts y los mandos del auto, además de reflejar las imágenes de la cámara de retroceso.

El Dart cuenta con una estructura reforzada con un 68% de aceros de alta resistencia, una jaula con deformación programada, apoyacabezas activos, anclajes para sillas de niños y ocho airbags, incluyendo dos de rodilla. En cuanto a seguridad activa, hay un sistema de control de tracción y estabilidad, frenos ABS con asistente de frenada en urgencia, asistente de arranque en pendiente, sistema de prevención antivuelco y monitoreo de presión de neumáticos.

El nuevo Dodge Dart estará disponible en versiones Rallye y Rallye Sport, ambos con el mismo nivel de equipamiento, salvo porque la segunda agrega llantas aro 17 oscurecidas y techo de vidrio con apertura eléctrica.

Ambos utilizan el motor gasolinero de 2.0 litros TigerShark, que eroga 160 caballos de fuerza y 200 Nm de par, y que asociado a una nueva caja automática de seis velocidades homologa en el 3CV chileno 13 km/litro en carretera, 11 en ciclo mixto y 8,5 en ciudad.

Los precios del nuevo Dodge Dart son $ 12.990.000 para el Rallye y un millón más para el Rallye Sport. La idea de Comercial Chrysler es colocar 50 unidades mensuales del modelo, donde prácticamente todos serían clientes de conquista, para alcanzar 10 mil unidades este año, un 20% más que en 2012.

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