El nuevo marco legal que endureció penas a choferes que consuman alcohol

La modificación a la Ley del Tránsito, conocida como Ley Emilia, endurece las penas contra quienes manejen en estado de ebriedad causando lesiones graves, gravísimas o la muerte. Ayer fue promulgada por la Presidenta Michelle Bachelet, para comenzar a ser aplicada estas Fiestas Patrias.

"Promulgamos esta ley cuando comenzamos la semana de celebración de Fiestas Patrias, porque desde ya tiene que quedar claro que haremos todo lo posible para evitar víctimas en el futuro", aseguró la Presidenta.

Durante 2013, 148 personas fallecieron en accidentes causados por conductores que manejaban bajo la influencia del alcohol o en estado de ebriedad. De estas muertes, 39 ocurrieron en Fiestas Patrias.

A partir de esta semana, toda persona que conduzca bajo la influencia del alcohol y que provoque lesiones graves, gravísimas o la muerte, deberá cumplir al menos un año de pena efectiva en la cárcel y para poder optar a beneficios de libertad condicional deberá cumplir, al menos, dos tercios de su condena.

"Lo que queremos hacer es un llamado al cambio de actitud y al cambio de cultura. No estamos buscando encarcelar gente, lo que queremos es que la gente tome conciencia, cambie su actitud, y si va a tomar no maneje", aclaró el ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo.

En el caso de reincidentes, conductores profesionales y de quienes manejen con su licencia vencida o cancelada, se les aplicará una pena desde 5 años y un día a 10 años. Quienes se fugan del lugar del accidente o se nieguen a realizarse el alcotest o la alcoholemia tienen una pena entre tres años y un día y 5 años de cárcel. "Nadie que mate a otro o lo deje grave o gravísimo va a dejar de estar en la cárcel al menos un año. Por eso es que es tan importante tomar conciencia de que no se puede manejar cuando se toma", enfatizó el ministro de Justicia, José Antonio Gómez.